Bajo seguimiento en juzgados, Junta y Ayuntamientos

El seguimiento del paro por parte de los funcionarios de Justicia y la Administración General ayer fue bajo. La Junta cifró en un 12% los funcionarios que pararon, y por su parte los sindicatos elevaron hasta el 30% los huelguistas entre los funcionarios judiciales. Mientras que la huelga apenas caló entre jueces y secretarios de juzgados, en los Ayuntamientos el seguimiento fue desigual, pero en general minoritario.

En los Consistorios hubo incidentes pero ninguno grave. En el Ayuntamiento de Córdoba fue necesaria la intervención de la policía a las 9.35 para permitir el paso a los trabajadores. Hasta entonces, unos 50 sindicalistas habían acordonado el acceso.

La Junta cifró en el 14,3% el seguimiento del paro en el sector de la Administración central y las empresas públicas, por lo que 7.890 funcionarios se ausentaron, de un total de 55.188. Mientras, de los 7.112 trabajadores de los juzgados, solo 1.199 no acudieron a su puesto: el 16,86%. CC OO elevó este porcentaje al 30% por los "órganos que quedan ciegos y la información que no es trasladada". "A pesar de las dificultades para llegar a los trabajadores, el resultado es para estar satisfecho, porque hemos mantenido el paro casi en solitario", declaró José María Vico, de CC OO. Los dos sindicatos mayoritarios, CSIF y STAJ no habían apoyado la huelga, convocada por los minoritarios Comisiones Obreras, USO y UGT.

El escaso seguimiento del paro se notó especialmente entre los jueces, de los cuales solo dos de 800 se ausentaron, y los secretarios judiciales, 7 de los 700 en la comunidad no acudieron al trabajo. Los juicios ya señalados para ayer se celebraron con normalidad, tal y como habían establecido los servicios mínimos y a diferencia de otras huelgas anteriores, en los que estos se suspendieron. La excepción fue el juicio del caso Malaya, cuyo tribunal optó la semana pasada por suspender la vista oral de ayer en previsión de que alguno de los 95 procesados o sus letrados no pudieran llegar a Málaga.

La mayoría de los funcionarios de los Ayuntamientos andaluces acudieron a su puesto de trabajo, a excepción de Córdoba, donde se ausentó el 65% del personal laboral y el 32% de los funcionarios. En el Consistorio sevillano se cifró el paro en el 21%, mientras que en Jaén solo faltó el 4,7% de sus 1.539 trabajadores. Uno de los signos más visibles de la huelga fue el botellódromo de Granada repleto de basura, ya que la empresa de limpieza secundó el paro al 100%.