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El jefe de los constructores desacredita a los partidos

El presidente de los constructores defiende un gobierno de empresarios

Ignacio Zafra

Juan Eloy Durá, presidente de los constructores valencianos, suele hablar claro, pero ayer no dejó títere con cabeza. Disparó contra el PP y los socialistas: "Son uno de los problemas de este país"; "su prioridad es ganar las elecciones y en este momento el país necesita mucho más". Contra AVE, el gran lobby empresarial valenciano: "Hay demasiadas voces"; "deberían respetar la hegemonía de la patronal autonómica, Cierval". Contra los sindicatos: "Es el momento de trabajar por el puesto de trabajo, no por una huelga"; "debería haber una reducción de liberados y enlaces sindicales". Contra la cúpula de la CEOE, la patronal española: "Necesitamos tener fuerza"; "la representación que hay ahora, con [Gerardo] Díaz Ferrán, no es la más adecuada". Contra el Gobierno: "Retirar las ayudas a la compra de viviendas protegidas daña la confianza de los inversores nacionales e internacionales"; "debería mantener la inversión y reducir los gastos corrientes".

Durá lanzó la bomba de racimo antes de ser reelegido presidente de Fevec, una de las federaciones empresariales más poderosas en los buenos tiempos y una de las que más ha sufrido por la crisis económica y el estallido de la burbuja inmobiliaria. Las declaraciones no sentaron bien entre el empresariado aludido. Pero la Asociación Valenciana de Empresarios (AVE), que hace tres días presentó una estrategia para reactivar la competitividad, declinó entrar en polémicas. Hubo quien subrayó, sin embargo, la aparente contradicción de que Durá pertenezca a AVE, a la Cámara de Comercio (a la que también mencionó en su intervención) y a Cierval y se permitiera hacer esas declaraciones públicas.

También hubo otras interpretaciones, porque el presidente de Fevec dijo que esperaba que en un año los empresarios tuvieran en Cierval su única voz. Y el año que viene habrá elecciones justamente en Cierval.El Estado ideal para Juan Eloy Durá es Panamá, país que ha conocido gracias a la nueva política de internacionalización de las empresas constructoras. Un lugar donde el Gobierno está formado por empresarios que fundaron un partido político. Donde la Administración paga los trabajos a 90 días vista (la Generalitat tarda más del doble) y el plazo resulta excesivo para las compañías privadas, que preferirían cobrar en 15. Donde se ha aprobado un potente plan de inversiones (carreteras, colegios, centros de salud...) que garantiza el negocio de las constructoras y la creación de puestos de trabajo.

Estando allí, contó ayer Durá, se planteó si el modelo sería "extrapolable" a España. La respuesta fue que sí: "Emilio Botín [presidente del Santander] por ejemplo. Botín y otros 10. Si se presentasen a las elecciones, yo creo que ganaría".

El líder de los constructores hizo una cruda descripción de PP y PSOE, a los que se refirió como "los dos partidos que pueden ganar en España": "Su máxima preocupación es esa, ganar las elecciones. Y eso no es un problema del país, sino de los partidos".

Durá no puso el acento en los retrasos en los pagos de la Generalitat, a diferencia de lo que hizo hace unas semanas la patronal de obra pública (Fecoval), que fue muy severa con el Consell. En parte, porque los asociados de Fevec dependen menos de los trabajos para la Administración. Preguntado por el asunto, sin embargo, Durá tampoco se escondió: "Reclamar vamos a seguir reclamando, porque es un problema. Si hay retrasos pediremos que se cumpla la ley, que dice 60 días. Y si no lo cumplen, estarán rompiendo la confianza de las empresas". El Gobierno valenciano, prosiguió, no obtiene ninguna ventaja de "pagar todo a 180 días"; "has ganado algo al principio, pero a partir de un momento en realidad estás pagando al día. Y ese retraso nosotros lo desplazamos a los subcontratistas".

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El presidente de la Federación Valenciana de Empresarios de la Construcción atendió a los medios de comunicación antes de entrar en la asamblea general extraordinaria que lo reeligió para el cargo. Junto a él estarán los vicepresidentes, Juan Cámara, Carlos Andújar, Francisco Zamora y Vicent Ciscar; el tesorero, Alfredo Cámara; y el contador, Juan Manuel Real. Durá agradeció el apoyo obtenido y afirmó: "En estos tiempos tan difíciles que vivimos, si de algo debemos sentirnos orgullosos es de nuestra federación". Fevec, recordó, ha pasado en 10 años de agrupar a 11 asociaciones a reunir a 21.

Aunque el mercado se ha animado un poco recientemente, Durá pronosticó que el año que viene será "bastante duro en construcción de viviendas y en obra pública". El futuro, prosiguió, está fuera, aunque para salir al extranjero las empresas valencianas, que son en general pequeñas, tendrán que asociarse.

"Los pisos se han abaratado un 40%"

El pasado ha sido cruel y el futuro pinta negro. El presidente de los constructores dejó también, sin embargo, alguna observación optimista en su larga intervención. En el segundo trimestre del año la venta de viviendas se incrementó un 14,7% en la comunidad autónoma, según el observatorio de la federación de constructores. La información es parecida a la del Instituto Nacional de Estadística, aunque este fijó el repunte en el 16,3%. ¿Es posible que la mejora se deba a la anticipación de compras antes de la subida del IVA de julio? "Este trimestre sigue habiendo tráfico", contestó sin precisar más.

En los años del boom (y Durá lo volvió a hacer ayer) los constructores justificaron la escalada del precio de la vivienda, en parte, por lo mucho que previamente habían tenido que pagar por el suelo. El Ministerio de Vivienda informó hace una semana que la crisis ha reducido un 44% el precio del suelo urbano valenciano. Una caída que alcanza el 56% en el caso de la provincia de Alicante. ¿Caerán en consecuencia los precios de la vivienda de forma significativa? "No creo", respondió Durá; "los precios ya han bajado un 40% y no creo que lo hagan mucho más". ¿Y la evolución del suelo? "Más que haber caído tanto, lo que ocurre es que no está habiendo transacciones de suelo", remató.

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Sobre la firma

Ignacio Zafra
Es redactor de la sección de Sociedad del diario EL PAÍS y está especializado en temas de política educativa. Ha desarrollado su carrera en EL PAÍS. Es licenciado en Derecho por la Universidad de Valencia y Máster de periodismo por la Universidad Autónoma de Madrid y EL PAÍS.

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