Los empresarios financiarán el corredor mediterráneo si la gestión es privada

Las hojas caen del calendario y los empresarios no aflojan, por si las moscas, la presión sobre el Gobierno. El corredor mediterráneo -un eje ferroviario exclusivo para mercancías- debe ser una red de transporte prioritaria para la Unión Europea a partir de 2011. Sobre su financiación, los dirigentes de las Cámaras de Valencia y Barcelona, reunidos ayer en la capital valenciana, fueron claros: "Para que haya financiación privada, debe haber gestión privada", explicitó el presidente de la Cámara de Valencia, José Vicente Morata.

Ambas cámaras presentaron, dos años después de su creación, las conclusiones del Observatorio de Infraestructuras del Corredor Mediterráneo, un grupo de trabajo responsable de valorar la evolución de este proyecto. "Este eje no solo es prioritario para los empresarios españoles [el corredor concentra el 40% de la economía española], sino para la europea, porque pone en contacto dos continentes: Europa y África".

Las cifras llueven a su favor. El corredor concentra el 55% de las mercancías transportadas en España, los puertos del corredor mueven el 60% del tráfico marítimo español y la zona geográfica por la que discurre recibe una cuarta parte del capital extranjero que desembarca en España.

Los dirigentes camerales, acompañados del constructor valenciano Juan Cámara y del catalán Antoni Ubach, subrayaron que el corredor cuenta a su favor con una excelente tasa de retorno de la inversión, el 11%, según algunos estudios. Es un proyecto rentable que se vende por sí solo, vinieron a decir. Según el presidente de la Cámara de Barcelona, Miquel Valls, "la liberalización del transporte europeo permitirá la inclusión de nuevos operadores y de capitales".

La vía de transporte de mercancías mediterránea nacerá en Algeciras y llegará hasta Portbou. Más allá de la frontera francesa, casi a Estonia. Por el sur, conectaría con África. Las dos cámaras insistieron en que debe tener una plataforma de doble vía exclusiva para mercancías, así como enlace directo y ancho internacional con los puertos de Barcelona y Valencia. "No se entendería un corredor sin conexiones con los centros portuarios", enfatizó Morata.

En este aspecto, según un reciente estudio del lobby empresarial Ferrmed, la conexión está atascada en ahora tres puntos: entre Alicante y Almería, entre Castellón y Tarragona y en el tramo francés de Montpellier a Perpiñán: tres cuellos de botella. El resto, hasta el centro de Europa, ya existe, según los empresarios del observatorio. Ahora, dicen las cámaras, es necesaria una reserva de suelo desde Algeciras a Portbou, para evitar problemas.

Entre los empresarios existen diversas opiniones en torno a cómo financiarlo. "La colaboración público-privada tampoco es la panacea", precisó Juan Cámara, quien puso encima de la mesa, como otra posibilidad, el sistema suizo, que en grandes infraestructuras impone tasas directas (peajes que pagarán los usuarios) e indirectas (por ejemplo, con un impuesto sobre el combustible).