Bruselas quiere pruebas de esfuerzo periódicas a la banca

El comisario de Asuntos Económicos y Monetarios, Olli Rehn, es partidario de repetir las pruebas de resistencia efectuadas a la banca europea que se publicaron el pasado 23 de julio para "reforzar la confianza" en el sector financiero. El comisario presentará una propuesta en este sentido en el próximo Consejo de Ministros de Economía de los Veintisiete que se celebrará en Bruselas el 7 de septiembre. El resultado del chequeo a la banca europea que se dio a conocer el pasado 23 de julio, solo afectó al 65% del sistema financiero europeo y fue considerado insuficiente por varios analistas. La repetición y ampliación de los exámenes podría contribuir a disuadir dudas.

Rehn avanzó esta iniciativa en una entrevista concedida a Bloomberg Televisión en Nueva York, en la que manifestó que los stress test, son "un instrumento muy útil para reforzar la confianza para la transparencia y un análisis sólido, firme y solvente". El comisario precisó que se trata de una idea inicial que tiene que hablar con los ministros de Economía.

Los ensayos serían más amplios, con el objetivo de reforzar la confianza

Bruselas quiere que las pruebas de resistencia a las entidades financieras, iniciativa promovida por España durante su presidencia de turno de la Unión durante el primer semestre de este año, se repitan cada cierto tiempo, aunque aún no ha decidido con qué frecuencia. Según los resultados publicados a finales de julio de las 91 entidades examinadas, solo el alemán Hypo Real Estate Holding AG, el Agricultural Bank of Greece, y cinco cajas españolas suspendieron la prueba por disponer de unos recursos propios inferiores al 6%. España, no obstante, fue el país más riguroso al someter el 95% de su sistema financiero a examen, con el objeto de recuperar la confianza de los mercados como realmente logró.

El comisario Rehn ha sido siempre partidario de la "completa transparencia" y la mejor información sobre el estado de salud de los bancos y de la extensión de las pruebas a otras entidades, según había explicado antes a los parlamentarios europeos.

El Ecofin del próximo 7 de septiembre abordará también el problema surgido por la negativa de Eslovaquia a participar en el vehículo de rescate de 440.000 millones para hacer frente a las dificultades en el mercado de deuda que eventualmente puedan tener algunos países europeos para colocar sus emisiones. El Consejo también deberá confirmar el segundo tramo de ayuda a Grecia aprobado por la Comisión Europea la semana pasada por valor de 9.000 millones de euros, así como analizar las últimas propuestas del paquete de la reforma financiera que el Parlamento Europeo deberá debatir el próximo septiembre.

Por otro lado, el dirigente europeo afirmó que los recortes del gasto tanto en España como en Grecia van por el buen camino, aunque matizó que todavía pueden ser necesarias algunas reformas adicionales.