Ripoll dice que las fusiones de cajas "al final no son lo que uno quiere"

La aprobación del proceso de fusión fría de Caja Mediterráneo (CAM) con Cajastur, Caja Cantabria y Caja Extremadura con la constitución de un Sistema Institucional de Protección (SIP), tras las tensiones de las últimas semanas en el seno de la entidad valenciana, fue ayer objeto de comentario por parte de responsables políticos y cargos públicos, con un trasfondo de resignación ante un resultado que no satisface las expectativas sociales.

El presidente de la Diputación de Alicante, José Joaquín Ripoll, fue el dirigente del PP más expresivo en este sentido. "Al final las cosas no son lo que uno quiere, sino que son las posibles, y éste ha sido el acuerdo posible", comentó sobre la CAM, tras haber recordado que había postulado otra operación, con Cajamurcia y otras entidades de ahorro.

Ripoll se mostró cauto sobre las repercusiones de la fusión al comentar: "Vamos a ver la evolución". Pero apostó por preservar la permanencia de la actividad de la CAM en el territorio alicantino. "De alguna manera habrá que preservar esa permanencia en el territorio a través de unas fundaciones o de otros mecanismos", apuntó, para añadir que mantienen la esperanza de que "los territorios poderosos tengan más posibilidades de dirigir los rumbos de las instituciones" resultantes de las fusiones.

Más incondicional fue la reacción del Consell. El vicepresidente de la Generalitat y consejero de Industria, Comercio e Innovación, Vicente Rambla, aseguró que el SIP de la CAM con otras tres cajas es "muy positivo". Según Rambla, la CAM y Bancaja son entidades "solventes y fuertes", pero en el nuevo mapa financiero "necesitaban una mayor presencia, una mayor fortaleza y una mayor dimensión para cumplir con el objetivo final y último de estas entidades bancarias, que es dar soporte y financiación a las empresas".

El contrato de integración para la constitución del SIP entre CAM, Cajastur, Caja Cantabria y Caja Extremadura se firmó ayer en Madrid. El sindicato Comisiones Obreras en la CAM consideró que la fusión garantiza la continuidad de la caja en el territorio. "Acabar con una intervención del Banco de España hubiera supuesto que la CAM pudiera ser absorbida o comprada", señaló el sindicato. Por su parte, CGT-CAM denunció que la dirección de la entidad ha postergado el acuerdo laboral a septiembre.