Controladores y sanitarios

No puedo entender por qué la Administración, tanto bajo Gobiernos de derechas como de izquierdas, se deja torear por el colectivo de los controladores, cuando la solución al problema es aparentemente tan sencilla, como lo demuestra la forma en que esa misma Administración trata al colectivo de los profesionales sanitarios.

Para llegar a médico de familia hace falta hoy una nota de ingreso en la facultad de 12 sobre 14 (casi un 9 en el sistema de puntuación anterior); seis años de estudio; un par de años de preparación para el MIR, y cuatro años de médico residente; y tras todo esto hay que buscarse la vida con guardias y sustituciones en horarios inhumanos que generan riesgos para médico y pacientes, por un salario anual que difícilmente alcanza los 40.000 euros. Y para colmo hay que esperar un montón de años antes de conseguir la puntuación necesaria para poder optar a un puesto en propiedad lo que, en realidad, no representará un gran aumento en la retribución.

La pregunta que me surge es ¿qué intereses ocultos impiden convertir la preparación para el trabajo de controlador en una carrera universitaria a la que, dado el escandaloso nivel retributivo (10 veces el de un médico de familia), optarían sin duda l@s estudiantes con mejores cualificaciones? Y no creo que la exigencia de una oposición para el ingreso fuera a desincentivar alos potenciales candidatos, cuando por muchísimo menos dinero hay quien se pasa años y años opositando para juez, por ejemplo.

Así que, ya que vivimos en un sistema capitalista hagamos actuar al mercado y dejemos que la oferta y la demanda equilibren la situación. La cosa es sencilla: si en un plazo razonable se duplicara el número de controladores y se dividiera su retribución actual por dos, por un lado aquellos no tendrían problemas de estrés por la sobrecarga de trabajo, y por otro tendríamos dos mil y pico controladores más, y todos ellos ganando cerca de 200.000 euros al año, lo que no está nada mal. Y si no que se lo pregunten a cualquiera.