La Comunidad elimina un programa de estancias de verano en residencias de mayores

Esta vez no habrá vacaciones. María Visitación Sánchez y sus dos hijas se quedarán todo el verano en su piso de Móstoles, como hacen el resto del año. María tiene que ocuparse de su marido, José María Campillo, de 47 años, tetrapléjico con respiración asistida. María es su cuidadora y, como tal, la Ley de Dependencia le ha reconocido un sueldo de 129 euros al mes. La familia llevaba años -15, los que han pasado desde la operación que dejó a José postrado en una silla de ruedas- sin poder moverse de casa, sin vacaciones. Hasta que hace dos años consiguieron una plaza del Programa Respiro Familiar de la Comunidad de Madrid. José pasó 15 días en una residencia especializada en lesiones medulares. "Mi hija pequeña vio el mar por primera vez", dice María.

El año pasado se beneficiaron 1.100 familias de dependientes

Este año, al solicitar por tercera vez la plaza, recibieron una carta de la Dirección General de Servicios Sociales en la que denegaban su solicitud. El motivo, según consta en el escrito, del 23 de junio: "No existir plazas temporales para respiro familiar". Ya se lo avisó la trabajadora social mientras esperaban respuesta: "Nos dijo que no contáramos con ello porque la Comunidad había eliminado el programa", afirma María. La Consejería de Familia y Asuntos Sociales no ha convocado este año las plazas temporales de residencia que venía ofreciendo para estancias de verano. El año pasado se convocaron 1.100 plazas -en realidad, no se trata de plazas sino de estancias, es decir, de beneficiarios-, según la Consejería.

"Se convocaban dependiendo de la necesidad", explicó ayer una portavoz de Asuntos Sociales, que añadió que, este año, se estudió la posible demanda y "se vio que no iba a haber necesidad". La portavoz aseguró que la Ley de Dependencia ya cubre este tipo de prestaciones a través de la ayuda económica que se da a los cuidadores en el ámbito familiar. Además, añadió que la mayoría de las solicitudes de otros años las pedían dependientes que aún no tenían plaza permanente en las residencias y que, ahora que ya la tienen, sus familias no iban a necesitar la estancia temporal de verano.

"Seguimos contando con plazas de estancia temporal en residencia, que se ofrecen todo el año", afirmó la portavoz de Asuntos Sociales. Son 300 plazas, según sus datos, destinadas a necesidades especiales o de emergencia. Es decir, que se debe justificar que la familia no puede ocuparse de la persona dependiente. "Si la gente necesita la plaza, la va a tener", subrayó. "Lo que no podemos hacer es duplicar recursos en tiempos difíciles económicamente; hay que gestionar bien". La Consejería cifró en unos dos millones de euros el coste del programa el año pasado. La Ley de Dependencia dice en su artículo 18 que se promoverán "acciones de apoyo a los cuidadores no profesionales que incorporarán a programas de formación, información y medidas para atender los periodos de descanso".

"Estamos en contra de la desaparición de este programa, que ayudaba a muchísimas familias. La OMS dice que el cuidador necesita tener un tiempo de descanso para poder cuidar mejor", afirma Carmen Sánchez Carazo, secretaria de Políticas Sociales del PSM.