Límites al voto emigrante y a los gastos de campaña

El informe de la subcomisión sobre la amplia reforma electoral limita el derecho de voto de los inscritos en el llamado CERA (Censo de Españoles Residentes Ausentes), es decir, los emigrantes. Cuando la reforma entre en vigor ya no podrán votar en elecciones municipales y en el resto tendrán serias restricciones.

Así, se instaura para ellos el voto rogado, que supone que han de inscribirse previamente, complicando su trámite, y, además, se establece para ellos el voto presencial y no por correo como ahora. No prosperó la intención de PSOE y PP de crear para ellos una circunscripción específica en el Senado, impidiendo también su voto en el Congreso.

- Encuestas. La reforma mantendrá la limitación a publicar encuestas durante los últimos días de campaña. "Durante los cinco días anteriores al de la votación queda prohibida la publicación, difusión o reproducción de sondeos electorales por cualquier medio de comunicación", asegura.

- Gastos electorales. El informe reduce en un 15% los gastos electorales de los partidos.

- Transfuguismo. Por primera vez, se incluyen en una ley medidas contra el transfuguismo en los Ayuntamientos, como limitaciones a las mociones de censura. Para eso se eleva la mayoría necesaria para cambiar el color de Ayuntamientos, cuando intervenga un tránsfuga.

- Avales para candidaturas. Para evitar la presentación de listas instrumentales, que sirvan solo para recibir el censo o subvenciones para los envíos postales, "las agrupaciones de electores necesitarán, al menos, la firma del 1% de los inscritos en el censo electoral de la circunscripción".

- Renuncias. La propuesta de reforma no aborda cambios en el sistema electoral para mejorar la proporcionalidad. Por ejemplo, rechaza las sugerencias del Consejo de Estado, defendida por IU, para elevar a 400 el número de diputados o la de crear una circunscripción nacional que recoja restos de todas las provincias. Tampoco obliga a celebrar debates, aunque el PSOE lo propuso en su programa y llegó a pactar con el PP la creación de un consejo que los organizara.

Para Gaspar Llamazares, la reforma "ilegaliza a IU" y entierra el pluralismo. El socialista José María Benegas replicó a la coalición que, en lugar de echarle la culpa al actual sistema electoral, analice por qué elección tras elección pierde votos "inexorablemente".