El Palau de les Arts paga una 'suite' de 2.500 euros al día a Zubin Mehta

Inmejorables vistas al mar. Así se publicita la suite presidencial del hotel de lujo en la que se hospeda en Valencia el director de orquesta Zubin Mehta. Su coste: 2.500 euros al día, en temporada baja. El Palau de les Arts se encarga de sufragar la estancia del reputado director en la habitación, de varios ambientes, al margen del sueldo que le paga como responsable del Festival del Mediterráneo. Mehta es una de las batutas más cotizadas del mundo, junto a Lorin Maazel, primer director musical de la ópera valenciana, que cobró 4,5 millones de euros en las tres primeras temporadas. Ambos han sido los artífices de la puesta en marcha de la Orquestra de la Comunitat Valenciana y de la programación operística.

En las últimas semanas, Mehta se ha significado por su apoyo explícito a las reivindicaciones de la Generalitat de una mayor dotación del Ministerio de Cultura para el Palau de les Arts. La consejera de Cultura, Trini Miró, ha hecho de las denuncias de agravio comparativo con otros coliseos españoles una de sus principales líneas de actuación política. En materia musical, sin embargo, se ha encontrado con la oposición de la Federació de Societats Musicals de la Comunitat Valenciana. El pasado domingo, 8.000 músicos valencianos protestaron en Valencia por el recorte de la Generalitat del 54% solo en el último año de las ayudas que recibían las sociedades, que aglutinan a 40.000 músicos de banda y a 280 escuelas, que forman a unos 60.000 alumnos. El brusco recorte puede significar el despido del 70% del profesorado.

El Palau de les Arts, cuyo diseño de Santiago Calatrava ha experimentado numerosas modificaciones y problemas, es una de las óperas más grandes y caras del mundo. Su coste se aproxima a los 400 millones de euros (incluyendo la urbanización del solar), según la Sindicatura de Comptes. Para su construcción, la Generalitat no solicitó ayuda al Gobierno, entonces presidido por José María Aznar. La Ciudad de las Artes y las Ciencias arrastra hasta finales de 2008 un sobrecoste de 600 millones de euros, de los que el Palau de les Arts ha generado una buena parte. De las cuatro salas que contiene, solo la principal funciona con una programación estable. El resto permanece normalmente cerrado, al igual que su enorme restaurante-cafetería, y solo en contados espectáculos han abierto sus puertas. La crisis económica ha obligado a disminuir el número de montajes operísticos de la sala principal y ha provocado una sensible reducción en el número de patrocinadores privados.