Un todoterreno completo y eficiente

Si busca un todoterreno compacto al precio más bajo, hay mejores opciones que el ASX, porque el 4 - 4 de Mitsubishi solo se ofrece con un motor turbodiésel de 150 CV y no puede competir con las versiones más asequibles de sus rivales (Qashqai, Kuga, Tiguan), que tienen motores de unos 100 CV, equipamientos menos nutridos y salen más baratos. Pero si lo que busca es la tarifa más competitiva entre los modelos más potentes y completos, el ASX es una de las mejores alternativas. Tiene un precio algo elevado, desde 24.150 euros con tracción delantera y 27.450 con 4 - 4, pero nadie ofrece un turbodiésel de 150 CV con un equipamiento tan extenso por esas cantidades.

El ASX supone la réplica de Mitsubishi al exitoso Nissan Qashqai, que se ha convertido en un fenómeno social. Aparte de su relación entre precio, potencia y equipamiento, apuesta por el estilo deportivo para diferenciarse y ofrece unas prestaciones, consumo y dinamismo que superan a la mayoría de los 4 - 4 de su tamaño. La gama se completará antes de que acabe el año, con un motor de gasolina y otro turbodiésel menos potente, y estas nuevas versiones reducirán los precios hasta unos 20.000 euros.

Con una longitud de 4,3 metros, el ASX se desenvuelve bien en ciudad y ofrece espacio suficiente para el uso familiar. La carrocería muestra una estampa vistosa y deportiva, con un frontal agresivo y una altura inferior a lo habitual en estos coches que afina la aerodinámica (CX: 0,32). Y el interior sigue el mismo camino, aunque no luce tanto porque la presentación resulta demasiado sobria. Pero aporta una habitabilidad correcta y cuenta con un maletero de 416 litros que se completa con respaldos abatibles y una trampilla para esquís.

El nuevo todoterreno de Mitsubishi estrena un motor 1.8 Di-D turbodiésel que sobresale por su rendimiento y recoge los últimos avances, como el sistema Start&Stop. Rinde 150 CV y va asociado a un cambio manual de seis marchas con recorridos cortos y precisos. El conjunto es suave y silencioso, acelera con brío y alcanza 200 km/h, pero solo gasta 5,5 litros de media (5,7 con 4 - 4). Y estas cifras convierten al ASX en el todoterreno de su potencia que menos consume, junto con el BMW X1. Este motor fabricado por Mitsubishi es la primera entrega de una nueva familia de turbodiésel que irán sustituyendo a los que utiliza ahora la marca, que proceden de VW, Ford y PSA (Peugeot-Citroën).

La conducción es cómoda, tanto por la postura al volante como por el tacto de los mandos, y el comportamiento está muy cercano al de un turismo. Así, tiene hasta un cierto toque deportivo, con una dirección rápida, reacciones ágiles y poco balanceo en curva. Las suspensiones ofrecen un buen compromiso entre estabilidad y confort y, junto a la insonorización, sientan las bases para viajar con comodidad. Pero la guinda la pone el equipamiento, que, con el acabado básico Motion, incluye todo lo importante: siete airbags y control de estabilidad, sensores de lluvia, luces y aparcamiento, control de velocidad, climatizador, llantas de aleación, radio CD/MP3, volante con mandos, bluetooth, USB y hasta faros de xenón, además de tres años de garantía. Las versiones 4 - 4 añaden un techo solar de gran tamaño, y el acabado Kaiteki (25.750 y 29.500 euros) suma tapicería de cuero, acceso y arranque sin llave, cámara trasera, navegador y equipo de música superior.