El 'laportismo' se atomiza

Nacido en Barcelona en 1964, Agustí Benedito es el socio número 34.235, está licenciado en derecho y se ha dedicado a la gestión de las empresas automovilísticas de su familia. Fue uno de los fundadores de la plataforma elefant blau, opositora al presidente Josep Lluís Núñez y de la que Joan Laporta fue uno de sus miembros más destacados. Con Laporta ya como presidente, Benedito fue miembro de la comisión deportiva y social del club hasta 2009, cuando dimitió. "Este modelo es bueno pero debe actualizarse", sostiene Benedito. A pesar de ser el candidato que menos firmas de apoyo acumuló (2.520), sus apariciones le han hecho ganar protagonismo, hasta el extremo de que los demás candidatos intentaron ganarse su complicidad. El ideario de Benedito, un líder con un equipo poco conocido, pasa por una reformulación de los gastos del club para adecuarlo a la crisis, por la continuidad de Guardiola como entrenador y, en cambio, por prescindir de Begiristain como secretario técnico. Además, pretende paralizar la recalificación del Miniestadi y renegociar el contrato de televisión para que los socios sin abono puedan beneficiarse de un descuento del 50% en los partidos de pago por visión.

Nacido en Barcelona en 1963, Jaume Ferrer es el socio número 79.935, está licenciado en Ciencias Empresariales y dirige su propio grupo de empresas, además de una consultoría. Ha formado parte de la junta de Laporta desde que accedió a la presidencia, en junio de 2003, y ha ocupado los cargos de vicepresidente y de responsable del área deportiva de la sección de balonmano. La propuesta de Ferrer pasa por seguir al pie de la letra con el modelo actual: "Lo que va bien es mejor no tocarlo". Pretende llevar a cabo las propuestas de Laporta que afectan al patrimonio de la entidad, como la recalificación del Miniestadi, donde planea construir un hotel, un centro comercial y un aparcamiento, además de crear la Ciutat del Soci, un complejo abierto en el que el socio pueda llevar a cabo distintas actividades. Ferrer también pretende crear el nuevo carnet Gent del Barça, a fin de ganar adeptos y, al mismo tiempo, regular el crecimiento de los socios del club. Asegura tanto la continuidad del entrenador, Pep Guardiola, como prácticamente también la del secretario técnico, Txiki Begiristain. Laporta ha jugado decididamente a su favor desde la renuncia de Alfons Godall.

Nacido en Barcelona en 1964, Sandro Rosell es el socio número 12.556, está licenciado en Ciencias Empresariales y cuenta con un master en Administración de Negocios. Rosell fue vicepresidente deportivo en la era Laporta durante dos años, de 2003 a 2005, pero dimitió por discrepancias con el presidente. Uno de los principales logros de Rosell fueron las contrataciones de Ronaldinho y Deco.

Uno de los pilares del modelo de Rosell es el acercamiento a la masa social, hacer que los socios "dejen de sentirse clientes para sentirse más propietarios". A nivel patrimonial, Rosell se opone a la recalificación del Miniestadi y apuesta por la creación del Espai Barça, un proyecto de remodelación de la zona que limita con el Camp Nou [unos 40.000 metros cuadrados], presupuestado en 150 millones de euros y que contempla la construcción de un nuevo Palau Blaugrana, además de un hotel y un gimnasio. También se propone dimensionar de manera diferente el museo dedicado al Barça, que incluiría varias exposiciones sobre la historia de Cataluña. Rosell apuesta por la remodelación del Camp Nou, pero descartando el proyecto Foster.

Nacido en Barcelona en 1966 y licenciado en Ingeniería Industrial. Empresario de las nuevas tecnologías. Socio del Barça número 62.428 y vicepresidente de mercadotecnia y posteriormente deportivo con Laporta, dejó la junta en el año 2008, después del voto de censura. "Laporta sobreutilizó su cargo", mantiene Ingla. También aboga por la continuidad de Pep Guardiola y de Txiki Begiristain y defiende el estilo futbolístico que simboliza Johan Cruyff. Entiende que se ha creado un cierto alarmismo sobre la deuda del club -los candidatos discuten sobre la deuda neta y la bruta (más de 480 millones)- y ejerce de líder de la candidatura de los capitanes, que agrupa a cuatro vicepresidentes: Ingla, Ferran Soriano, Alfons Godall y Albert Vicens. Los cuatro fueron decisivos en el arranque del modelo de 2003 hasta que se enfrentaron con Laporta, entregado al nuevo director general, Joan Oliver, y por tanto menos partidario de una gestión colegiada. Propone una cuota anual gratuita para los socios en paro, doblar los ingresos en seis años e incrementar el valor patrimonial. Favorable a la recalificación del Miniestadi y contrario al proyecto Foster de remodelación del Camp Nou.