López resalta el valor del consenso sobre el plan de Convivencia

El plan Convivencia Democrática y Deslegitimación de la Violencia, que ayer adquirió por fin carta de naturaleza legal al ser aprobado por el Consejo de Gobierno, "será un paso importante para asegurar nuestra libertad", afirmó el lehendakari, Patxi López, quien revalidó su liderazgo y la coordinación que Lehendaritza ejercerá sobre él, al considerarlo un instrumento de primer orden que ayudará a acelerar "el fin del terrorismo de ETA". Además de ambos valores, López le atribuyó el de "afianzar la solidaridad interna de la sociedad vasca".

López, quien compareció personalmente ante los periodistas tras la reunión del Consejo de Gobierno en Gernika, resaltó el grado de consenso alcanzado, tanto con el PP como con el PNV. "Hemos logrado un nivel de entendimiento importante que hay que poner en valor", apuntó, en lo único que puede interpretarse como un emplazamiento indirecto a los peneuvistas, cuyo portavoz, Joseba Egibar, minimizó el acuerdo alcanzado. López dijo estar satisfecho y haber cubierto expectativas. Sobre todo, recordando el punto de partido de "rechazos absolutos y peticiones de retirada".

López sostiene que nunca buscó "adhesiones acríticas" al plan

El lehendakari dejó expresa la trascendencia que le otorga a la iniciativa y las expectativas que tiene puestas en ella. Esas tres tareas a las que el plan contribuirá -asegurar la libertad, terminar lo antes posible con ETA y afianzar la solidaridad social- requieren de la colaboración de "todas las instituciones, los medios de comunicación, el entramado asociativo y la comunidad educativa". A todos ellos emplazó a "arrimar el hombro en el esfuerzo deslegitimador del uso de la violencia y en defensa de los derechos humanos y el sistema democrático".

En vísperas del debate de hoy en el Parlamento, López puso especial cuidado en limar cualquier arista y se negó a entrar en comentarios sobre la resistencia del PNV a admitir la existencia del consenso, del que se mostró satisfecho. Su única llamada más o menos directa a ese partido fue para que deje de interpretar como una crítica a la acción de sus gobiernos cualquier actuación del actual Ejecutivo. Atajó con un "no voy a entrar" las preguntas en esa dirección, tras añadir al PNV a su lista de agradecimientos y decir expresamente que su objetivo fue siempre "minorar rechazos y ampliar consensos". Por eso, sostuvo, el Ejecutivo antepuso el diálogo que podía conducir a acuerdos al plazo para cerrar el texto que se fijó inicialmente.

López resaltó la incorporación casi al completo de las sugerencias del Consejo Escolar y admitió que con estas y otras "el documento ha mejorado en calidad y construcción formal".

El lehendakari equiparó en importancia "los principios" y objetivos que guiaron la iniciativa desde el principio con la ampliación de los apoyos y basó esa equiparación en el convencimiento de que en esta materia "es necesario que no exista Gobierno y oposición", sino que todos los demócratas vayan juntos.

López realizó un reconocimiento expreso al plan del Gobierno anterior, cuyo carácter integral y programas se mantienen, y del que dijo haber realizado "una relectura constructiva".

Las modificaciones son "ampliaciones", siguió conciliando, y un intento de hacer "más clara la comprensión" y evitar "esfuerzos interpretadores a los agentes educativos". El Gobierno nunca buscó "adhesiones acríticas", aseguró, y por ello "se han integrado todas las propuestas que lo mejoraban, sin renunciar a los principios rectores y objetivos", resumió, convencido de que el plan, que ya tiene "menos rechazos que hace mes y medio", cosechará más respaldo a medida que se vaya aplicando.