Álava abre las discrepancias del PNV en política fiscal en las diputaciones

La Diputación de Álava mantiene las medidas fiscales que el lunes presentó el diputado general, Xabier Agirre, a pesar de las críticas de sus homónimos en las instituciones forales de Vizcaya y Guipúzcoa. Así lo volvió a asegurar ayer el teniente de diputado Claudio Rodríguez, quien desveló, además, frente a los comentarios procedentes de los territorios vecinos, que las propuestas de Álava estaban consensuadas con las otras dos diputaciones y con el presidente del EBB, Íñigo Urkullu. De paso, Álava pone al descubierto las discrepancias que los jeltzales mantienen en las diputaciones y facilita así las criticas al PSE-EE.

El tridente que utiliza el PNV para debilitar al Gobierno de Patxi López no cuenta con la férrea solidez que se esperaba. A falta de once meses para los comicios forales, cada una con sus propios intereses electorales, las tres diputaciones no llegan al consenso en un asunto de esta trascendencia, hasta el punto de que ayer el desacuerdo sobre las medidas fiscales continuaba. Es más, las contradicciones alcanzan al socio de los peneuvistas en Guipúzcoa, Haimakabat, cuyo portavoz, Martín Beramendi, censuraba a Agirre por su falta de entendimiento: "La autonomía fiscal nos exige una coordinación entre todas las diputaciones", señaló. Pero, al mismo tiempo defendió la misma medida de Agirre (mayores impuestos para las renta más altas) en su territorio.

Desagrado del EBB por la salida de Agirre, que asocian a un "calentón"

La dirección 'jeltzale' asume que se ha facilitado el ataque desde el PSE

El portavoz foral alavés, Claudio Rodríguez, tuvo que asumir ayer el duro trago de responder a las preguntas de los periodistas sobre los versos sueltos en los que se han convertido las diputaciones en materia de recortes. Rodríguez asumió que recibía con sorpresa las críticas, más contundentes desde Vizcaya. Según él, las tres instituciones habían consensuado distintas medidas fiscales pensando en las rentas más bajas. "Los diputados generales ya se lo advirtieron al lehendakari en la última reunión y que las llevarían a la próxima reunión del Órgano de Coordinación Tributaria" (OCT). Se refería al encuentro que mantuvieron los cuatro mandatarios en mayo y en la que Agirre, Bilbao y Olano anunciaron a Patxi López medidas para paliar los efectos de los ajustes propuestos por Rodríguez Zapatero.

Claudio Rodríguez admitió, eso sí, que la iniciativa de grabar a quienes más ganen a partir de más de 150.000 euros podría variar en cuanto al importe. "La cantidad, en efecto, quizás pueda cambiar, pero la iniciativa se mantiene", advirtió.

"Las propuestas anunciadas no se pueden calificar de simplistas", señaló Rodríguez en respuesta al calificativo empleado por el diputado general de Vizcaya, José Luis Bilbao. Rodríguez alabó las medidas de Álava dirigidas a bonificar con un 10% el IRPF de pensionistas y desempleados con rentas inferiores a 18.000 euros, o penalizar a las empresas que, obteniendo beneficios, destruyan empleo.

En clave política, garantizó que Álava no adoptará ninguna medida de manera unilateral, sino que buscará el consenso con Vizcaya y Guipúzcoa para acudir al OCT, previsto para el martes próximo. "Las tres diputaciones vamos a trabajar en el mismo sentido y con las mismas medidas", subrayó. Así también se transmitió desde el EBB. "Él tiene claro lo que se va a hacer y cuál es la postura del partido", confirmó un portavoz del PNV, quien eludió confirmar cualquier contacto entre el presidente del partido y el diputado general alavés para llamarle al orden. Las fuentes consultadas no ocultaron ni la sorpresa ni el desagrado por la salida de Agirre, de la que no descartaban que se debiera a "un calentón".

La "descoordinación", que admitieron sin paños calientes fuentes del EBB, no pasará a mayores y será subsanada, aseguraron, al tiempo que admitieron que Agirre ha brindado un gratuito flanco de ataque al PSE, al Gobierno y al lehendakari. El presidente del PNV, Iñigo Urkullu, acababa de pedirle la víspera que se coordine con las diputaciones. Ante las posturas contrapuestas de Agirre y Bilbao, el partido se siguió mostrando refractario a la subida de los tipos a las rentas altas, cuyo efecto recaudatorio se minimiza, tanto por la cantidad que supondría como porque el resultado sólo se vería en 2012, informa Isabel C. Martínez.

Pero lo que está claro es que el plan de ajuste que avanzó Xabier Agirre el lunes ante las Juntas Generales no es una ocurrencia. Las líneas de trabajo están definidas y cuentan con el apoyo del socio del PNV en la Diputación alavesa, Eusko Alkartasuna. Y además goza de la aquiescencia del PSE que dirige Txarli Prieto, que ha respaldado todos los presupuestos de Xabier Agirre y ha mantenido una actitud de fair play en el caso de corrupción en el que se ha visto implicado el ex diputado foral jeltzale Alfredo de Miguel.