El sueco amenaza de nuevo

la raqueta está rota, el tercer set perdido y la primera advertencia del juez de silla ya ha sido sumada. Nada indica que el sueco Robin Soderling, verdugo de Rafael Nadal en 2009, vaya a jugar la final de Roland Garros por segundo año consecutivo. Y, sin embargo, ocurre: gana por 6-3, 3-6, 5-7, 6-3 y 6-3 en tres horas y 37 minutos al checo Thomas Berdych y reivindica su capacidad para jugar en tierra por encima de cualquier estereotipo, su personalidad contra los grandes (batió antes al suizo Roger Federer ) y su candidatura a resucitar a un fantasma, tenista de resonancias terribles y de nombre Adriano Panatta.

"Nadal juega en otra Liga. Es el gran favorito", opina el ruso Yevgeny Kafelnikov, ex número uno y ex campeón del torneo. "La tierra es una superficie lenta que siempre favorece a los que jueguen de forma inteligente, como Rafa", sigue. "Soderling puede jugar un partido apretado en el marcador, pero no ganar el título. Rafa tiene suficientes armas y fuerzas para ganarle incluso si pierde los dos primeros sets. Los cinco sets, se ha demostrado ya, favorecen a los mejores. Y ahora Nadal es el mejor", añade. "Además, todo el mundo sabe que Roland Garros es el torneo más duro, el más difícil de ganar". "La historia", cierra, "así lo demuestra".

Aun así, la historia demuestra muchas otras cosas. Que Nadal será el tenista más joven en ganar siete competiciones del Grand Slam, tras el sueco Björn Borg, si vence mañana. Que Nadal será parte de la privilegiada lista de 13 jugadores, Borg entre ellos, que han recuperado el número uno tras perderlo, si gana mañana. Y que Nadal, igual que Borg, el de los seis títulos parisienses, parece indestructible, apenas abordable, en tierra...

Solo un jugador logró batir en París a Borg, el hombre de hielo: Adriano Panatta, que le eliminó dos veces. Solo uno ha ganado en París a Nadal, el coloso de la tierra: Soderling, que sueña con hacerlo dos veces.

¿Puede? "Ya le he ganado. Sé que puedo. Lo he demostrado", dijo, simplemente, un sueco disfrazado de fantasma.