El Banco de España expedientará a Cajasur por el exceso de ladrillo

Cajasur siguió inyectando decenas de millones de euros en el negocio del ladrillo incluso en 2009, cuando la burbuja inmobiliaria había estallado y las entidades financieras trataban de reducir su riesgo con el sector. Solo en la sociedad Prienesur, Cajasur inyectó 127 millones el pasado año, pese a las serias advertencias que el auditor hacía sobre el futuro de dicha sociedad. Las fuertes pérdidas y los elevados créditos a sociedades del sector provocaron que la entidad cordobesa vulnerase la normativa sobre recursos propios mínimos y sobre concentración de riesgos. La única salida era la fusión con Unicaja, rechazada a última hora por el Consejo de Cajasur, controlado por representantes de la Iglesia. Ahora, el Banco de España, presidido por Miguel Ángel Fernández Ordóñez, abrirá expediente para investigar las responsabilidades de los administradores de la entidad, según las fuentes jurídicas consultadas.

Tanto los representantes del PSOE como del PP en la caja de ahorros coinciden en señalar a los canónigos de la Iglesia presentes en el Consejo como culpables del desenlace. El destituido presidente de Cajasur, Santiago Gómez Sierra, admite que la entidad "se iba desangrando día a día".