Pinto deberá explicar sus mentiras

José Manuel Pinto, empleado público de la Consejería de Interior que dirige Francisco Granados, volverá a ser citado por la juez a tenor de la pericial caligráfica oficial que le ha identificado como el autor de las notas manuscritas de los partes del espionaje al vicealcalde madrileño, Manuel Cobo, y al ex vicepresidente segundo del Gobierno de Aguirre, Alfredo Prada.

Hay dos vías que hacen inexorable la nueva citación: el informe policial ha puesto de manifiesto que Pinto le mintió media docena de veces cuando le aseguró que no había visto en su vida tales papeles y que no era su letra; y, por tanto, es muy improbable que la juez no desee pedirle aclaraciones sobre dichas falsedades, que pueden ser interpretadas como una obstrucción a la Justicia, a sumar al delito de malversación de fondos que ya se cernía sobre él, según explicaron fuentes personadas en el caso.

Las defensas de las tres víctimas -Cobo, Prada y la parlamentaria autonómica del PP, Carmen Rodríguez Flores- ya tienen claro que es imprescindible que vuelva a comparecer.

El teléfono de Palomo

La fiscalía también da por hecho que es inevitable una nueva visita de Pinto al juzgado. Por tanto, de un modo u otro, Pinto volverá a explicarse ante la juez. Y esta vez quizá sí reconozca, al contrario de lo que hizo en el anterior interrogatorio judicial, el número de teléfono que le requirió uno de los letrados, el 649 19 16 68.

Es el teléfono de su compañero permanente, el supervisor José Palomo, su jefe inmediato. Llevan años trabajando juntos, y en la etapa del entonces director general de Seguridad Sergio Gamón ambos estaban liberados de cualquier otra tarea para estar a sus exclusivas órdenes.

Los posicionamientos delatan decenas de llamadas entre ambos. Ninguna de ellas les sitúa en las zonas más conflictivas del espionaje a los dirigentes del PP rivales de Aguirre que sufrieron tal acoso por miembros de su aparato de seguridad, si bien Pinto en alguna ocasión figura en las cercanías del domicilio de Cobo realizando llamadas.

Mientras, las defensas de las víctimas han vuelto a requerir que comparezcan ante la juez el resto del equipo de Granados sospechoso de realizar tales labores ajenas a su cometido oficial: Palomo, los ex policías Roberto Casielles, Belén Espartero, José María Rodríguez y el principal asesor de Granados, el ex inspector Marcos Peña.