Pasajes retrasa dos o tres años más las obras del puerto exterior

Las obras del puerto exterior de Pasajes, uno de los principales proyectos que tiene pendientes Guipúzcoa, no podrán estar finalizadas en 2020 como estaba previsto hasta ahora, sino que experimentarán un retraso de "dos o tres años", según reconoció ayer el presidente de la Autoridad Portuaria, Miguel Buen. La ejecución se demorará más de lo calculado debido a los recortes que el Gobierno central realizará en las inversiones públicas, argumentó.

La reducción de los fondos de Fomento obliga a la dirección del puerto a revisar sus previsiones iniciales, explicó Buen. Añadió que los 6.000 millones que el Ejecutivo de Zapatero dejará de invertir este año en obra pública no afectarán "para nada" a la futura infraestructura portuaria, puesto que el inicio de su construcción está fijado entre finales de 2012 y comienzos del año siguiente.

La actividad del puerto pasaitarra mejoró un 23% en el primer cuatrimestre

El puerto exterior de Pasajes tiene un coste que rondará los 1.000 millones de euros, de los que las instituciones aportarán 750 millones. Los trabajos se ejecutarán por fases. Inicialmente tendrá 143 hectáreas de superficie -frente a las 70 actuales-, 4,5 kilómetros de muelles de atraque, un dique de abrigo de 2,3 kilómetros de longitud y podrá recibir buques de hasta 230 metros de eslora con capacidad para transportar 50.000 toneladas. La propia Autoridad Portuaria tiene previsto endeudarse en 250 millones en 40 años para hacer frente a la inversión.

Buen abordó también en qué punto de la tramitación se encuentra el puerto de dársena a mar abierto. Precisó que a fines de este mismo año podría estar redactada la memoria ambiental, que incluirá, según ha admitido Buen en otra ocasión, un estudio completo de todas las soluciones portuarias, incluida la posibilidad de mantener la actividad portuaria en su actual ubicación.

El presidente del puerto guipuzcoano también dio cuenta de la mejoría del tráfico registrado en las instalaciones en abril pasado, qu supuso un incremento del 41% respecto al mismo mes de 2009. En el primer cuatrimestre de este año, el aumento llega al 23%, hasta alcanzar los 1,2 millones de toneladas.

Mientras, el consejero de Transportes, Iñaki Arriola, expresó ayer en San Sebastián su confianza en que el recorte de Fomento no retrase las obras del tramo del AVE vasco que corresponden al Gobierno central, el que discurre por Vizcaya y Álava. Arriola reafirmó que su departamento mantiene el objetivo de impulsar el ramal guipuzcoano, el que es de su competencia.

El titular de Transportes recuerda que su departamento cuenta con un calendario de ejecución de este tramo al que se prevé "darle un fuerte arreo" este año, como ya ocurrió en 2009, para situarlo al nivel del ejecutado por el Gobierno central.

Sobre el alcance que la reducción de fondos para obra pública anunciada por el presidente Zapatero podría tener en las infraestructuras vascas, Arriola se mostró cauto y aseguró que todavía es pronto para poder opinar. "No tenemos una información concreta de cómo se plasma este asunto. En este momento hay que ser prudentes", añadió.