Escuela de rimadores

Lo primero es una buena presentación, sobre todo en un concurso: "Eu chámome Pablo / dou saúdos ao xurado / dádeme uns puntiños / que o xamón xa está encargado". Desde esta copla de presentación, es obvio que el participante en cuestión ya estaba clasificado para la ronda final. Aunque para meterse al jurado en el bolsillo, bien vale un alarde de sinceridad: "Dígovos o meu nome / eu chámome Antonio / pero mellor non me faledes / porque vos son un demonio".

Cada uno de los cerca de 100 finalistas del V Concurso Escolar de Regueifas organizado por el Servizo de Normalización Lingüística del Concello de Vigo, la Asociación Oral de Galicia y el Centro Cultural e Veciñal de la parroquia viguesa de Valadares jugó ayer su baza para atender los requerimientos puestos por los conductores del acto, los regueifeiros Luís Caruncho y Pinto d'Herbón, que se desga-ñitaron para gobernar el entusiasmo del público.

Los regueifeiros Luís Caruncho y Pinto d'Herbón presentaron el acto

Armados con pancartas de ánimo, grabando todo con sus teléfonos móviles y lanzando vítores constantemente, unos 400 adolescentes que cursan estudios en ocho centros escolares de Vigo llenaron el auditorio del centro vecinal. El ambiente de competición era digno de una hinchada futbolística para animar a los regueifeiros adolescentes que, con sus vestimentas deportivas, sus minifaldas y sus gafas de sol en la cabeza, improvisaban estrofas a partir de una rima, un verso de arranque, un juego de palabras o un pé forzado.

El concurso arrancó meses atrás, cuando el Ayuntamiento invitó a los institutos a participar en una iniciativa nacida en Vigo y que, durante el Gobierno de la Xunta bipartita, se extendió a toda la provincia de Pontevedra. Caruncho y Herbón visitaron los centros interesados y desarrollaron talleres de regueifa con los chavales, para mostrarles las variedades gallegas de esta técnica de improvisación oral rimada. Después, sus profesores seleccionaron a los participantes en el concurso y hasta ayer. El futuro comenzó a despejarlo el teniente alcalde vigués, el nacionalista Santiago Domínguez, quien comezó su intervención con una copla ("Vós cantades en galego / e eu estou emocionado / o futuro desta terra / está xa asegurado") y remató con el anuncio de un plan para crear en Valadares la primera escuela municipal de regueifa.

La ubicación no es casual. Desde 1997 tiene sede en el Centro Cultural y Vecinal de la parroquia viguesa la Asociación de Oralidade, Arte e Rima de Galicia, Oral, que aglutina a los regueifeiros en activo, así como a contadores de historias, raperos y creadores que, de manera amplia, hacen de la expresión oral una modalidad artística.