Caixa Girona limitará la reestructuración al 5% de la plantilla

Caixa Girona tiene previsto cerrar una quincena de oficinas y prescindir del 5% de su plantilla, lo que se traduce en 56 empleados. Es el objetivo que se marca la caja gerundense en su plan de negocio para seguir en solitario, pese a los llamamientos a las fusiones desde el Banco de España y la Generalitat. La entidad, fundada por la Diputación de Girona, está en fase de revisión de su estrategia, después de que su Consejo de Administración rechazara continuar en el proyecto de fusión Unnim, del que forman parte Caixa Terrassa, Caixa Sabadell y Caixa Manlleu.

Las líneas maestras del plan de negocio, que conocieron los consejeros de la entidad el pasado 22 de marzo, prevé mejoras de eficiencia y ajustes "para asegurar la rentabilidad de la entidad en estos años, tomando como punto de partida el hecho de que Caixa Girona es una de las caja catalanas con una ratio de eficiencia más elevada", según un comunicado emitido por la entidad que dirige Jordi Blanch. Su ratio de eficiencia -que mide lo que gasta por cada 100 euros que ingresa- es del 45,8%, sólo por detrás de Caixa Tarragona.

La caja admite que contempla vender activos para tener más provisiones

Todas las cajas, catalanas y españolas, están podando su red de oficinas para prescindir de las que les resulten menos rentables y las que generen menos negocio para la entidad, porque sus redes se expandieron en los tiempos de bonanza y ahora no son todas necesarias. Las fusiones, por el solapamiento de oficinas de distintas entidades, maximizan este recorte de sucursales.

Ya en 2009, la caja gerundense cerró nueve sucursales y se quedó con un total de 229. La fusión en la que se embarcó con Unnim la había comprometido a participar de una reestructuración concebida a escala de cuatro cajas. Y ahora, una vez descolgada de la integración, ha acotado el alcance del recorte. Los cierres se realizarán de forma "selectiva" y se centrarán fuera de las comarcas de Girona y en poblaciones donde haya más de una sucursal abierta, señaló la caja en un comunicado.

El plan de negocio de Caixa Girona, con 1.132 empleados, busca una mayor penetración en el segmento de pequeñas y medianas empresas, una línea ya emprendida en los últimos años, así como una presencia más elevada en banca privada y banca personal. Como las demás cajas.

En el comunicado, la entidad admite que valora desprenderse de "distintos activos" que puedan aportarle resultados extraordinarios con que engordar sus provisiones, el colchón para protegerse de los morosos. No dice qué activos. Entre ellos puede optar por sus 4,1 millones de acciones en Abertis, y también se contempla la venta de la red de oficinas, para quedarse en ellas de alquiler, y dar entrada a un socio en su negocio asegurador.