Los últimos parados del textil tienen un plan

Las mesas del diálogo social han alumbrado su primer acuerdo casi un año después de que el PP ganase las elecciones en Galicia. El proyecto se llama Empregatex, y está pensado para recolocar a las personas que se hayan quedado en el paro procedentes del sector textil. La Xunta, a través de las consellerías de Traballo y Economía, espera que se apunten al plan cerca de 500 desempleados y que de ellos, 300 consigan un puesto de trabajo después de seguir cursos a medida.

Las condiciones que pone la Comisión Europea para financiar el 65% de los tres millones de euros que cuesta el programa son estrictas: tiene que beneficiar a contratados de forma indefinida que hayan sido despedidos en los últimos nueve meses (como los más de 200 operarios de Caramelo o los 64 de la empresa lalinesa Toypes). De hecho, está enfocado a ex trabajadores de firmas que han presentado ERE en A Coruña y Lalín principalmente, y en menor medida del resto de Pontevedra y Ourense.

Economía facilitó más ayudas a empresas del sector por la crisis

"El año pasado, 900 personas del sector se vieron afectadas por regulaciones de empleo", señaló la conselleira, Beatriz Mato, durante la presentación de la iniciativa. Javier Guerra, titular de Economía, no perdió la oportunidad para recordar que el sector recibió durante el arranque de su mandato muchas más ayudas, avales y préstamos que en el mismo periodo del año anterior. Lo achacó a la situación de crisis y recordó que el conjunto de empresas que trabajan en el textil-moda son estratégicas para Galicia: "Son más de 1.200 firmas que emplean a más de 14.000 personas y facturan 7.600 millones de euros al año, una cifra similar a las ventas de Citroën".

Desde la Federación de Industrias Afines de UGT, su secretario, Juan Fernández, calificó la iniciativa como "una buena herramienta", para dar una salida laboral a muchas personas, sobre todo mujeres de mediana edad, que están siendo víctimas de la reconversión del sector. "Se pretende apoyarlas para que accedan a trabajos que generen valor añadido en el área de diseño o logística", dentro del textil. También enfocarán la formación a otro tipo de sectores, como el asistencial. El programa reserva 400.000 euros, a razón de unos 400 euros mensuales por persona, para ayudar económicamente a quienes tengan que desplazarse para hacer los cursos. Recibirán el mismo apoyo quienes tengan personas a su cargo y necesiten ayudas para conciliar la formación y el trabajo en el hogar. Los cursos comenzarán a impartirse en centros de A Coruña, Lalín y Vigo.

La patronal gallega del ramo, Cointega, también está implicada en el diseño del programa y ayudará a ponerlo en marcha en el polígono del textil de Texvigo.

Fuentes de la Consellería de Traballo señalaron que se trata de una de las primeras acciones del plan de Actuación Social que la semana pasada presentó el presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, y que promete crear 10.000 empleos al año hasta el 2013. Esta acción en concreto tiene una duración de 24 meses, por lo que hasta pasados dos años no se sabrá cuántas de las personas desempleadas consiguen finalmente recolocarse. El sector, que gracias a la multinacional coruñesa Inditex consigue mantener las exportaciones, está siendo uno de los más castigados con la crisis. Aún así, según Guerra, el conglomerado del textil realiza el "37% de las ventas al exterior que hace el sector a nivel nacional".