La Barrié pagó 54 millones por la sede del Banco Pastor

Si el precio del metro cuadrado en los Cantones de A Coruña -donde todavía permanecen sin rehabilitar edificios adquiridos antes de la burbuja inmobiliaria-, se acercara a lo que se pagó el año pasado, la milla de oro de la ciudad herculina no tendría nada que envidiar al paseo de la Castellana. La emblemática sede del Banco Pastor en el Cantón Pequeño fue comprada por la Fundación Barrié de la Maza por 54 millones de euros en una operación diseñada por la entidad para obtener liquidez a través de enajenaciones de inmuebles y posteriores arrendamientos.

De acuerdo con un informe de la entidad presentado en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), otra de las sedes históricas, situada en la viguesa calle Policarpo Sanz, también adquirida por la Fundación Barrié por 28 millones de euros. En total, la institución vinculada al banco se dejó 82 millones de euros en ambas sedes, que formaban parte de los 160 inmuebles, de un total de 650, que sacó al mercado. La previsión inicial del Pastor era ingresar 230 millones con la venta y posterior alquiler a largo plazo de las oficinas repartidas por España.

La Fundación Barrié, accionista mayoritario del Pastor con un 42,1% de su capital, asumió dichas operaciones para "blindar" los inmuebles, tanto por su carga histórica como por su elevado coste para un inversor, a pesar de que los contratos de enajenación establecen que el banco se queda como inquilino de dichos inmuebles a largo plazo.

Compras de consejeros

Miembros del propio consejo del banco asumieron de forma particular la compra de inmuebles. En concreto, el presidente, José María Arias, y los consejeros José Luis Vázquez Mariño y José Arnau Sierra, los dos últimos vinculados a Inditex y a Amancio Ortega, (que controla un 5% del banco), firmaron compras por 3,2 millones de euros conjuntamente. Vázquez Mariño adquirió cinco oficinas por 1,7 millones, Arnau otra por 171.000 euros. El presidente de la entidad se dejó 1,4 millones en otro inmueble. Desde el Pastor aseguran que los tres miembros del consejo se hicieron con un lote de siete oficinas.

La operación del Pastor, asesorada por Aguirre Newman, es similar a la que llevaron a cabo otros bancos españoles, pero a diferencia de éstos se orientaba tanto a inversores grandes como a medianos.