El Gobierno evalúa supeditar el pacto económico a lograr la inclusión del PP

Una vez terminada la primera ronda de contactos con los partidos a la búsqueda de un pacto contra la crisis, el Gobierno analizará todas las propuestas de la oposición y elaborará un nuevo documento de conclusiones que presentará en los próximos días a la oposición. Las propuestas que incorpore el nuevo documento marcarán los objetivos y las preferencias políticas del Ejecutivo.

La ronda del palacio madrileño de Zurbano ha cambiado la idea inicial del Gobierno. La troika ministerial —Elena Salgado, vicepresidenta segunda; Miguel Sebastián, titular de Industria, y José Blanco, de Fomento— inició su tarea con la presunción de que los acuerdos factibles vendrían por el "centro": CiU, PNV y Coalición Canaria, dada la hostilidad del PP y el rechazo de los grupos de izquierda a la subida de un impuesto indiscriminatorio como el IVA.

La vicepresidenta económica presentó el viernes en el Consejo de Ministros un informe sobre la ronda del palacio de Zurbano y puso el acento en las coincidencias existentes con el PP. Salgado, Blanco y Sebastián reseñaron las tres materias básicas en las que hay un principio de acuerdo con el PP y los demás partidos: La reducción del IVA para la rehabilitación de los edificios y la concesión de los créditos directos por el ICO para pymes y autónomos.

La troika ministerial apuntó en el Consejo de Ministros la importancia de un acuerdo con el PP, la de primar el acuerdo de mayor consenso sobre el de contenidos más amplios. Lo que implicaría supeditar el alcance de la negociación al acuerdo con el PP. El Consejo de Ministros no tomó ninguna decisión. El presidente José Luis Rodríguez Zapatero quiere tomarse tiempo para evaluar la ronda de contactos antes de pronunciarse en un nuevo documento. La metodología está por determinar, pero previsiblemente el Gobierno abandone Zurbano y opte por reuniones bilaterales con los partidos, técnicas y discretas.

Hace ya dos semanas que Zapatero y Blanco dijeron en la Ejecutiva del PSOE que iban a esforzarse hasta el límite para que hubiera pactos con el primer partido de la oposición porque un acuerdo con él es el que más confianza da a los mercados nacionales e internacionales.

En todo caso, el Gobierno cree que las reuniones del Palacio de Zurbano han sido un acierto porque después de unas semanas aciagas ha tomado la iniciativa política. Además, ha ofrecido a la sociedad una imagen que reclaman todas las encuestas, la de los partidos reunidos para afrontar soluciones a la crisis, pese a sus discrepancias y a las distancias que subraya el PP. "Se ha logrado desdramatizar la vida política", señalan fuentes próximas a la troika que, además, dan por seguro que habrá acuerdos de entidad.

En este sentido, las medidas en que se percibe amplio acuerdo se pondrán en marcha inmediatamente: rebajas para la rehabilitzación de viviendas, créditos del ICO para pymes y contra la morosidad. CiU, PNV y Coalición Canaria han insistido que entren en vigor de inmediato sin esperar a los dos meses que el Gobierno se ha dado de plazo para cerrar acuerdos.

La oposición está a la espera de que el Gobierno enseñe sus cartas y su actitud no será pasiva. Tanto CiU como PNV no pondrán la pasarela para que el Gobierno se luzca con el rótulo del gran acuerdo si creen que las coincidencias son insuficientes. La izquierda —ERC, IU, ICV y BNG— pugnarán hasta el final por lograr del Gobierno el apoyo a sus postulados. Pero no será fácil. El Gobierno está decidido a subir el IVA el 1 de julio, medida que rechazan izquierdas y derechas por razones distintas.