¿Qué hacemos con la basura?
El 32% de los vecinos de Usurbil participó ayer en la primera jornada de la consulta sobre el sistema de recogida de residuos para su reciclaje
Quien se desplazó ayer a Usurbil sabía, nada más entrar en la localidad, que vivía una jornada especial. Una pancarta informaba de la celebración de la consulta popular sobre el sistema de recogida de basuras este fin de semana, después de haber probado durante casi un año el conocido puerta a puerta. Ayer tocaba depositar la materia orgánica, como evidenciaban los pequeños cubos de color marrón que colgaban de su correspondiente gancho en el exterior de los portales.La mayoría de quienes votaron ayer lo hicieron por la mañana por el temporal anunciado. A la una de la tarde, ya había participado cerca del 20% de los 4.500 vecinos llamados a la consulta. Al cierre de las urnas el porcentaje era de un 32%, según fuentes del Ayuntamiento.
El porcentaje de participación fue similar a cualquier cita electoral
En las mesas instaladas en la biblioteca municipal parecía que se celebraban unas elecciones normales; con su presidente, vocales e interventores. En esta ocasión, los votantes debían contestar a la pregunta: "El objetivo es llegar a reciclar y reutilizar la mayor cantidad de residuos generados. ¿Cuál de los siguientes sistemas quieres para Usurbil?" Y podían escoger entre tres papeletas: el sistema actual de puerta a puerta, volver al sistema de los cuatro contenedores o instalar un quinto contenedor orgánico.
"Me parece muy bien que se haga un referéndum, todo el mundo tiene derecho a opinar, y se tendrá que acatar lo que salga", señalaba Itziar, de 39 años, después de votar a favor del puerta a puerta, según explica, como una forma de mostrar su rechazo a la instalación de una incineradora cerca de Usurbil.
Los vecinos partidarios del sistemas aseguran que lo más costoso es acostumbrarse a separar la basura, pero no el hecho de tener asignados unos días concretos para cada tipo de basura. Y rechazan el quinto contenedor porque con ese sistema "mucha gente echa toda basura sin separar".
Sin embargo, los detractores, como Manuel, de 75 años, destacan el alto coste que supone el puerta a puerta, un millón de euros la puesta en marcha y 450.000 euros al año, según explica Luis Mari Ormaetxea, de H1, único grupo municipal que apuesta por el quinto contenedor, junto a una plataforma de vecinos que ha logrado que se convoque la consulta popular tras reunir 800 firmas. "Esto tendría que ser un proceso progresivo. Hay gente mayor que no tiene capacidad para separar los residuos y que le supone un problema tener materia orgánica durante varios días en casa", argumenta Manuel.
Los mismos que solicitaron el referéndum interpusieron ayer un recurso de reposición ante el Consistorio al considerar que el procedimiento aprobado por el Ayuntamiento es "nulo". Imanol Azpiroz, concejal de la izquierda abertzale de Usurbil, asegura que "se han dado todos los pasos legales que tenían que darse".
Todas las miradas estarán puestas hoy sobre los resultados de la votación especialmente en localidades como Hernani, donde en mayo se pondrá en marcha la recogida a domicilio y se han recogido 5.000 firmas para solicitar un referéndum.
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