_
_
_
_

El alcalde y el ingeniero

José Ángel Montañés

Casi todo el mundo en Barcelona sabe quién es Ildefonso Cerdà, pero son pocos los que conocen que Josep Santa-Maria i Gelbert fue el alcalde que gobernaba la ciudad en 1859, cuando se aprobó el plan urbanístico del ensanche.

Semiolvidado por la historia, su biznieta Glòria Santa-Maria acaba de publicar Decidir la ciutat futura Barcelona 1959 (Museo de Historia de Barcelona), donde reivindica su papel en el momento en el que la ciudad decidió cómo sería en el futuro. El fin de Barcelona como plaza de guerra, la lucha por conseguir la propiedad de los terrenos que dejó el derribo de las murallas, la reforma de la ley de expropiación forzosa, la convocatoria de un concurso público de proyectos para el ensanche y la reforma de Ciutat Vella marcaron la política del Ayuntamiento, presidido por Santa-Maria entre 1858 y 1863.

Más información
El 'otro Cerdà' del Eixample

La investigadora, vaciando las actas municipales, siguiendo la correspondencia entre Ayuntamiento y Gobierno central, estudiando los 12 expedientes para el proyecto del ensanche y escrutando la prensa de la época, documenta, paso a paso, la llamada "batalla por el ensanche" y acaba con algunos de sus tópicos. En su opinión, Cerdà, más que ser un instrumento del Estado central, supo moverse en los ambientes gubernamentales, tomar iniciativas arriesgadas en todos los frentes y, en algunos momentos cruciales, inclinar la balanza del poder a favor de sus propuestas personales.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Sobre la firma

José Ángel Montañés
Redactor de Cultura de EL PAÍS en Cataluña, donde hace el seguimiento de los temas de Arte y Patrimonio. Es licenciado en Prehistoria e Historia Antigua y diplomado en Restauración de Bienes Culturales y autor de libros como 'El niño secreto de los Dalí', publicado en 2020.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_