Canto al amanecer de la política

El centro cultural municipal Conde Duque cuenta hasta el 18 de abril una historia tan compleja como fascinante: la que narra el surgimiento de la ciudadanía, es decir, el ejercicio de la libre acción política del pueblo en España entre los años 1808 y 1869.

Tan enjundioso relato se compendia en una exposición inaugurada ayer por Alberto Ruiz-Gallardón, alcalde de Madrid; Alfonso Guerra, ex vicepresidente del Gobierno y presidente de la Fundación Pablo Iglesias; y Soledad López, que rige la Sociedad Estatal de Conmemoraciones Culturales, mentora también de la muestra enmarcada en las celebraciones del bicentenario de la Constitución de Cádiz de 1812.

Descrita a través de 250 objetos, documentos, pinturas y arte suntuario -como una ilustrada vajilla- procedentes del Museo de Historia Municipal, de Patrimonio Nacional, Museo del Prado, Congreso de los Diputados, Senado y otras instituciones, cuatro grandes ámbitos enmarcan la narración. La soberanía nacional, idea germinal sobre la que se erigió todo el edificio político ciudadano. Los escenarios de sociabilidad, tertulias, círculos y ateneos, donde creció la conciencia y el debate, que en la muestra incluye desde un café de la época hasta una galería dedicada a la prensa. Los principales actores individuales y colectivos. Y, para culminar, los instrumentos políticos, señaladamente constitucionales, que coadyuvaron a culminar el proceso.

La muestra reúne originales de las Constituciones del siglo XIX

En este cuarto espacio conmueve ver dispuestos sobre una vitrina originales de las seis Constituciones: la de 1808 o de Bayona; la llamada La Pepa, de 1812; el Estatuto Real de 1834; el texto constitucional de 1837, la Non nata de 1854 y la Constitución de 1869, la más avanzada, que jalonaron aquella gesta iniciada en el Cádiz doceañista. Gracias a su conquista por el pueblo, la historia de España salió del absolutismo para adentrarse en una era nueva, la del liberalismo, espoleada por el ímpetu modernizador de la Revolución Francesa.

Entre las principales pinturas atrae por su patetismo un boceto del gran lienzo El fusilamiento de Torrijos y sus compañeros, de Antonio Gisbert. Llama la atención el retrato del político Juan Álvarez Mendizábal, chiclanero, mientras firma el acta de la desamortización de los bienes de la Iglesia católica. Emociona contemplar las orlas de Mártires de la libertad, editadas por los liberales durante el siglo XIX. En ellas figuran desde el general librepensador Rafael de Riego hasta los comuneros castellanos y los integrantes de las Germanías valencianas alzadas contra el rey Carlos I, Guillén de Sorolla y Vicenta Jimeno -"ahorcada en 1522 de la ventana de su casa", reza el cartel-, que da idea de las tribulaciones sufridas. A ellas se refirió en su alocución Alfonso Guerra, que destacó el drama de los afrancesados -colaboradores del Gobierno napoleónico- desgarrados entre la afección por el legado emancipatorio de la Francia revolucionaria de Bonaparte y la comprometida certeza de la ocupación militar de España.

Por su parte, el alcalde Alberto Ruiz-Gallardón subrayó que la exposición brinda un potente estímulo para fortalecer las convicciones sobre la necesidad y nobleza de la actividad política, en un tiempo que caracterizó como "marcado por el escepticismo". Alfonso Guerra y Alberto Ruiz-Gallardón, que intercambiaron cumplidos, coincidieron en subrayar el papel determinante de la razón en la adquisición de la ciudadanía y en la conquista de las libertades.

Ciudadanos. El nacimiento de la política en España (1808-1869). Centro cultural Conde Duque. Conde Duque, 9. De martes a sábados, de 10.00 a 21.00. Domingos y festivos, de 10.30 a 14.30. Hasta el 18 de abril. Entrada gratuita.