Mejora la confianza en las finanzas españolas

La volatilidad se mantuvo en niveles máximos en esta última sesión en la Bolsa española. El Ibex 35 registró oscilaciones importantes que le llevaron a perder el 1,19% en la apertura para llegar a una subida máxima intradía del 1,30%.

Como en la jornada anterior, los inversores siguieron mostrando grandes diferencias en su apreciación del riesgo, aunque casi siempre muy relacionadas con el nivel de las cotizaciones. Al cierre de esta sesión, el Ibex 35 subió el 0,68% para quedar en 10.275,40 puntos, mientras que el índice que representa a los valores medianos del mercado ganaba el 0,40% y el de los pequeños cedía el 0,77%.

Junto con los esfuerzos institucionales para alejar los productos financieros españoles de la trayectoria de la inversión a corto plazo, se vio en la sesión un comportamiento más calmado por parte de la inversión más estable. Esto fue más evidente tras conocerse que la agencia FITCH de calificación de riesgo había decidido mantener para la deuda española la máxima calificación "AAA" al considerar que la economía española sigue ofreciendo garantías para tener ese nivel.

Con este ambiente aparentemente más calmado, el sector financiero español consiguió remontar posiciones, aunque todavía se notaron la constante actividad y los efectos de la inversión a corto. Para algunos analistas, la decisión de la agencia FITCH supone un cambio importante en la valoración de las grandes compañías españolas, ya que su salida a los mercados para captar recursos se verá menos presionada por el riesgo país, algo que ha estado muy relacionado con las caídas de los últimos días.

Los datos macroeconómicos publicados ayer en Estados Unidos resultaron un tanto neutros, pero consiguieron no desilusionar al mercado. Los inventarios mayoristas cedieron en diciembre lo mismo que aumentaron las ventas, confirmando el leve estancamiento del consumo, al tiempo que los pequeños empresarios mantienen una opinión todavía pesimista sobre la evolución de la economía. Aun así, el índice Dow Jones de valores industriales conseguía recuperar el nivel de los 10.000 puntos y aportaba algo más de confianza al cierre de los mercados europeos.

El Mercado Continuo negoció 4.732,53 millones de euros.