El Oracle tampoco se casa con Valencia

La más alta tecnología al servicio de la vela se da cita estos días en la ciudad de Valencia. Es un encuentro entre dos magnates; un encuentro, plagado de secretismos, engaños, acusaciones veladas, desencuentros, desplantes... La bronca está servida. Ayer tarde, cuando se presentaron ante la prensa internacional ambos equipos, los dueños de uno y otro dieron buena muestra de su depauperada amistad. Así como del poco valor que tienen sus promesas. Inmediatamente después de terminarse la 33ª Copa del América, que arranca el lunes, el vencedor dará a conocer la sede de la próxima edición. Y a pesar de los esfuerzos de las instituciones valencianas por repetir, Valencia pierde fuerza. Si el dueño del Alinghi, Ernesto Bertarelli, ya renunció a comprometerse con la ciudad de Valencia, ayer le tocó el turno a Larry Ellison, armador del BMW-Oracle.

El Oracle no retirará la última demanda si pierde en el mar

Ellison dará plantón hoy a Bertarelli en un cara a cara ante la prensa

El norteamericano y su equipo han defendido una y otra vez que si ganaban esta 33ª Copa se encargarían de celebrar una competición convencional -similar a la de 2007, con muchos más equipos- de nuevo en Valencia. Es más, a diferencia del Alinghi, que nunca fue claro al respecto, éstos remitieron una carta a los representantes políticos y también al Rey de España para informarles de su compromiso con la ciudad. Hoy parecen no tenerlo tan claro. Preguntado al respecto ayer, Ellison respondió que en estos momentos sólo piensa en ganar la Copa, no mira más allá: "Vamos a concentrarnos en ganar las próximas dos regatas", dijo. Pues sólo habrá una tercera si un mismo equipo no gana las dos primeras.

La misma respuesta dio cuando le preguntaron si esta 33ª Copa terminará cuando acabe la batalla en el agua. La última demanda que el Oracle interpuso en los tribunales, a cuenta de la procedencia de las velas del Alinghi, se revisará cuando haya acabado la regata, según decisión de la juez que lleva el caso. Y a juzgar por la contestación de Ellison, si pierden el duelo en el mar, la guerra por la Jarra de las Cien Guineas continuará en los tribunales. No piensan, al menos no de momento, retirar la demanda.

Y por si el sinfín de acusaciones en el discurso de Bertarelli ("Larry es un hombre muy ambicioso. Creo que pensó que no tendría ninguna oportunidad de llegar a la final sin acudir a los tribunales") no fuera suficiente para encender aún más los ánimos, Ellison avivó el malestar. Según advirtió ayer, dará plantón al suizo esta tarde, cuando estaba previsto un cara a cara entre los dos armadores de los equipos finalistas de la Copa del América ante la prensa, organizado por los organizadores de esta 33ª edición. Ellison requería de un apoyo, Russell Coutts (tres veces campeón de la Copa) para enfrentarse a Bertarelli, pero el encuentro es entre los dueños de ambos equipos. "Como no dejan que Russell vaya, yo tampoco voy", sentenció el americano para sorpresa de los organizadores.