Este fugitivo se burla en Facebook

Se llama Craig Lynch, pero le llaman Craig Lazie Lynch, algo así como Craig El vago Lynch. Tiene 28 años de edad y mide 1'80. Su cara se ha convertido en un icono de la red. Bueno, su cara y su dedo: desde su perfil en Facebook, cerrado desde fin de año, el fugitivo de moda ha estado saludando al mundo entero con ese dedo que manda un mensaje nítido y conciso. Un mensaje a la policía que le persigue, un mensaje al sistema, un mensaje que ha despertado simpatías a lo largo y ancho del planeta. Esta suerte de Dioni inglés tiene ya miles de fans. Su cara y su dedo venden camisetas. Ya hay canciones en la red que engrandecen sus andanzas, en clave de rap, en clave de country. Ha nacido una estrella; otra estrella, probablemente fugaz, de la red.

La última vez que se le vio fue EL 23 DE SEPTIEMBRE DE 2009. lLa policía británica lo busca desde entonces

."Sí, sí, he conseguido llegar a las navidades, he derrotado su puto sistema y me encanta", escribió en su página

Y mientras, el tipo se ríe de la poli en cada una de sus apariciones. Queda por saber cuánto tardará en volver a la cárcel, cuánto durará la broma.

Hace ya más de tres meses que abandonó la prisión de Hollesley Bay, en Suffolk, Inglaterra. La última vez que se le vio fue a las 16.15 del 23 de septiembre. Desde entonces, ha estado narrando sus andanzas a través de la red social Facebook, colgando las fotos de sus hazañas. "Sí, sí, he conseguido llegar a las navidades, he derrotado su puto sistema y me encanta", escribió en su página.

Su imagen, medio desnudo, con una guirnalda roja al cuello, un pavo tostadito en una mano y el dedo corazón saludando al respetable, ha sido ampliamente aplaudida. Este fue su mensaje: "Si alguien tenía dudas de que estoy en libertad, aquí una prueba: ¿Cómo si no podría poner mis manos sobre un pájaro como éste en prisión?, ¡ha ha!", escribió. Como ocurre en tantas ocasiones en la red, se propagan rumores, se engrandecen leyendas, y la gente ya no sabe qué es cierto y qué no. El asunto Lynch ha crecido tanto a lo largo de estos meses que los internautas llegaron a poner en duda su existencia, su fuga, todo. Así que estas navidades, el vago de Lynch -no tan vago, como dice la camiseta que ensalza su figura- decidió mandar su postal navideña para demostrar que sigue vivito y coleando. Sin perder el humor. Disfrutando de la fama.

Una cosa está clara. Tiene en jaque a la policía británica, que, al cierre de esta edición, seguía buscándole. Lo confirma en conversación telefónica Anne-Marie Breach, portavoz de la policía de Suffolk. "Seguimos tras sus pasos. Estamos intentando localizarle en distintas zonas del país", declara. "Hemos hablado con los responsables de Facebook, sí, pero éste no es el único terreno en el cual estamos investigando".

Escaparse fue fácil. Lynch disfrutaba de un régimen abierto, estaba en lo que en Inglaterra y Gales llaman una prisión abierta. Tenía que volver a dormir a la cárcel cada noche, pero podía salir de día. Estaba llegando al final de su condena de siete años por robo a mano armada. Desde el Home Office británico -Ministerio del Interior- , declinan comentar la naturaleza del delito que cometió, que en la red atribuyen al robo a una mujer anciana. Desde el Ministerio de Justicia, el portavoz Yasser Mehmood, explica: "Solemos decir que es una locura escapar de un régimen abierto. Además, el 93% de los presos que lo hacen son recapturados". Al vago de Lynch le dio igual que le quedara poca pena por cumplir. El lema que colgó en su perfil deja clara su filosofía: "La vida es lo que tú haces de ella, vive rápido, muere joven".

Craig Lazie Lynch buscaba su momento de gloria. Se le ha podido ver más que sonriente sujetando un cartel con la leyenda: "Se busca a Craig Lynch. Si lo encuentran, llame al 999"; con una birra en la mano; con el pavo. A pesar de todo, sabe que su película no tendrá un final muy feliz: "Os reiréis conmigo", publicó en su página, "pero esto acabará en lágrimas. Siempre acaba así".

Son varios los grupos de fans y de discusión que se han constituido en torno a su figura en Facebook. ¿Where is Craig Lazie Lynch? -Dónde está Craig Lazie Lynch- contaba al cierre de esta edición con más de 3.000 miembros: "¿A que no te atreves a venir por Valladolid?", le escribía el internauta Diego Alonso González en el día de Reyes. En el grupo Craig 'Lazie' Lynch, de más de 900 miembros, también le celebran la fuga: "Eres mi ídolo", escribe Aitu Gutiérrez.

El grupo que rechaza la actitud del fugitivo, We hate Craig Lynch -Odiamos a Craig Lynch-, cuenta con menos adhesiones: algo más de 380 miembros. Y su página cuenta con 931 fans.

La red social decidió cerrar el perfil personal del prófugo a fin de año. Pero mantiene los grupos de discusión abiertos.

Lynch es consciente de que andan tras sus pasos. El 29 de diciembre, la cadena de televisión británica Sky News ofrecía una entrevista telefónica con el convicto. "No soy un mal tío", decía el presunto Lynch por teléfono a una redactora. "Lo primero: no debería haber sido condenado, las evidencias eran mínimas".

Preguntado por cómo desea que acabe su película, mantuvo su tono juguetón con la policía: "Yo me entregaré en una comisaría, no me van a coger. No les voy a dar el placer de que me cojan".