Vitoria, congelada y sin reacción
El temporal colapsó la ciudad ante la insuficiente respuesta del Ayuntamiento - Las calles y carreteras se convirtieron en pistas de nieve helada
Aunque el temporal llegaba advertido y con un día de retraso, la nieve cogió ayer por sorpresa al Ayuntamiento de Vitoria, que no reaccionó siquiera para ofrecer los servicios mínimos para mantener la ciudad en activo hasta el mediodía. Desde primera hora de la mañana, las principales vías de acceso y comunicación en la capital alavesa sufrieron atascos considerables al convertirse en hielo los más de diez centímetros de nieve que cubrían las calles, mientras quedaban bloqueados los accesos a los polígonos industriales de Miñano o Jundiz.
A primera hora de la tarde, cuando la indignación ciudadana se había transmitido por las emisoras de radio y dominaba las conversaciones en los lugares de trabajo, la alcaldesa en funciones de la ciudad, Marian Gutiérrez, anunció que se iban a distribuir 17 máquinas quitanieves por la ciudad y por las zonas rurales del municipio. La medida llegaba tarde, "muy tarde", en opinión de la concejal del PP, Idoia Garmendia, que denunció "la falta de planificación del gobierno municipal" ante una nevada anunciada.
Los ciudadanos critican la falta de previsión de los servicios municipales
Garmendia se hizo eco de la indignación ciudadana que se respiraba desde primeras horas de la mañana. El Ayuntamiento había anunciado que pondría sal a disposición de los vecinos para que la vertieran en aceras y rampas de garajes, pero la inactividad de los servicios municipales fue clamorosa. A las ocho y media, en una zona estratégica como la parada del Centro Civico Iparralde, que comunica el populoso barrio de Zaramaga con el resto de la ciudad, los retrasos de la red de autobuses superaban la media hora. En los nuevos barrios de Salburua y Zabalgana, la comunicación era prácticamente imposible.
Y en la última urbanización, la de Mariturri, que ejerce de enlace con el polígono de Júndiz, el más importante de la ciudad, "durante toda la mañana no se ha podido distinguir entre las aceras y la calzada, ni siquiera en la avenida principal", comentó una vecina indignada en SER Vitoria.
Quizás la expresión más gráfica del caos que ofrecía la ciudad ayer por la mañana la ofrecía Juan, un vecino de Izarra, localidad de las Estribaciones del Gorbea, que trabaja en el centro de la capital: "La autovía [de Altube] estaba limpia, pero ha sido llegar a Portal de Foronda [la vía de acceso para quienes llegan desde el norte de Álava y Bilbao] y encontrarme en lugar de asfalto con una placa de hielo. Por precaución, he dejado el coche en Lakua y he tomado el tranvía".
Este sistema de transporte, tan denostado en otras ocasiones por algunos vitorianos, se convirtió ayer en el medio más rápido y seguro para desplazarse por la ciudad. La red de autobuses urbanos sufrió el colapso de la vía de circunvalación, donde se encuentran los túneles del centro cívico Boulevard, que permanecieron cerrados media mañana. Los retrasos superaron durante horas más de 30 minutos en la mayor parte de las líneas.
Como reconoció un portavoz del cuerpo de Bomberos, encargado de la seguridad durante la madrugada de ayer, "el temporal ha superado nuestras expectativas al llegar más tarde de lo previsto, a últimas horas de la madrugada, ya que ha superado el efecto de la sal que habíamos vertido durante la noche". Para reconducir la situación la teniente de alcalde, Marian Gutiérrez, firmó un decreto por el que se moviliza a todos los funcionarios mientras dure el temporal "aunque se encuentren de vacaciones o cuenten con días libres".
Los peatones no se libraron de los peligros de la nieve en las aceras. Según los partes hospitalarios, 17 personas habían sido atendidas en Txagorritxu y Santiago con fracturas de muñeca y tobillos, costillas rotas y contusiones diversas, a última hora de la tarde.
Por otra parte, las principales carreteras de Álava vivieron ayer la pesadilla de los moteros que acudían a la concentración Pingüinos en Monteduero (Valladolid) y que sufrieron numerosos accidentes a su paso por la provincia.
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