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Reportaje:

Una Nochevieja de saldo

Fiestas y menús en oferta, gasto contenido y 'glamour' de andar por casa para el fin de año de la crisis

Da igual que se haya escrito que un millón de valencianos ha tomado los centros comerciales esta Navidad: sólo hace falta hablar con las dependientas para darse cuenta que la máxima era mucho mirar y pasear, pero apenas comprar. Tampoco debe sorprendernos que muchos establecimientos rurales -generalmente, más baratos que los urbanos- estén completos (ocupación del 93,3% en la Comunidad, según la web especializada Toprural): han llegado a brindar ofertas de 2 por 1.

Y es que la noche que más dinero se gastaba del año se ha convertido en este tránsito a 2010 en la de la búsqueda del chollo. Manda el saldo casi inconcebible. "Varias parejas vamos a Benidorm del 31 al 3 de enero por 265 euros", explica María, de 50 años, de Valencia. "Nos entra habitación doble en un buen hotel, cena de gala de fin de año y pensión completa". Bueno, bonito y barato. Y pese a ello, no faltan las cenas que bajan más el precio prescindiendo de marisco y de cotillón. Tampoco faltan los empresarios que ofertan cenas con aforo limitado para no contratar trabajadores. "Esa noche, un camarero cobra 80 euros extra", explica un veterano propietario de un restaurante de L'Horta Sud, "y es preferible montar en tu local una cena para pocas personas servida por ti y tu mujer, que una para mucha gente en la que tengas que pagar esos sueldos".

Unos tres millones de ciudadanos despedirán el año 2009 activamente

Portales de Internet como Lastminute han venido ofreciendo viajes para esta noche un 30% más baratos que el año pasado. "Han crecido los viajes de gente adinerada a destinos competitivos como Nueva York o Jordania", explica Fernando Fortea, de la compañía de viajes Check In Travel, "pero han bajado hasta en un tercio los viajes a Teruel, Albarracín, Benidorm, Peñíscola, o destinos por el estilo, que antes eran muy de Nochevieja".

No obstante, los hoteleros de la Costa Blanca hablan de una posible ocupación -lo definitivo se sabrá después de la fecha- del 90% para este puente de Nochevieja-Año Nuevo. El precio medio de discotecas para esa noche es de 30 euros -las hay que a 20 permiten la entrada a tres clubes del mismo dueño- e incluye hasta cinco copas en fin de año, entrada para el día 1 y 2, y la Noche de Reyes, todo con copas. El precio medio de las fiestas especiales -que antes vendían elitismo y no bajaban de 60 o 70 euros- es ahora de unos 45 euros. Algunos clubes ofrecen, a precios caricaturescos, barra libre por horas (de medianoche a 4 de la mañana, normalmente) o un paquete de 5 copas. En vista de cómo está el patio, discotecas como Barraca o Infinity -ambas en Valencia- prefieren no competir esa noche y abrir en horario matinal del día de Año Nuevo. Otras, como Bananas o Falkatta, se alían con promotoras que han hecho nombre en Ibiza como Matinée o Supermartxé. También se montan saraos en espacios llamativos como un galeón pirata entre Port Saplaya y Pobla de Farnals. La entrada para esta última cosa se ha podido conseguir hasta por 40 euros (el año pasado se pagó a 70). Cabe decir, además, que los antaño exitosos cotillones en salones de bodas, con sus abusivos precios tradicionales, casi han desaparecido del mapa.

Según el informe que cada año elabora la consultora Deloitte, cada hogar español va a gastar al término de estas fiestas unos 735 euros, 175 menos que el año pasado. El capítulo que más se resiente es el reservado a "salidas" (la principal, en fin de año). Deloitte indica que, si en 2007 la media de gasto en ese apartado era de 194 euros, en 2008 bajó a 186 y en 2009, está bajando a 105 euros. Lo cual significa una variación de un 43,5% a la baja respecto a 2008. "Sin embargo, yo diría que la demanda ha mejorado", explica José Antonio Bellvert, de Agencia Farley, que organiza abundantes fiestas para esta noche. "Se ha conseguido bajando los precios un 15% y ofreciendo cenas de gala que no resulten caras junto a una habitación de hotel para descansar tras la fiesta". Farley ofrece celebraciones de este estilo en Elche, San Juan, Alcoi y Gandia. Y hasta tres noches -la de hoy incluida- con cena, copa y pernoctación en Benidorm, por 115 euros. El público de entre 18 y 24 años es el que más se ha resentido con la crisis, y de entre 25 a 35 años, el que mejor ha acogido la nueva opción de dormir la farra en hoteles concertados.

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"Esta noche unos tres millones de ciudadanos de la Comunidad celebrarán activamente la Nochevieja", indica Vicente Pizcueta, de la Federación Empresarial de Hostelería de Valencia (FEHV), "y la mitad saldrá a fiestas o locales de ocio". Respecto a 2007, "este sector ha caído en un 30% de facturación, y esta Nochevieja se ha reinventado con la opción de hotel". Discotecas enclavadas en parques comerciales de ocio como Guru han destacado en ligar esta opción para jovencitos a un teórico glamour a imitación de lo que -supuestamente- sucede en el mundo de las jaranas adultas. En Inglaterra lo viene haciendo cada fin de año el club Hed Kandi, especialista en servir teóricas raciones de lujo y finura para las masas a través de fiestas con hotel para el bajón. En Barcelona, esto ha sido propio de promotoras para público gay. Ahora, con la crisis, se expande a todos.

"Los menús de Nochevieja y cotillones varios han caído entre un 30% y un 50%", explica Emiliano García, de la Federación Española de Hostelería. Calcula que en el ocio nocturno específico, "a veces ha habido bajadas de hasta el 60%". "Se ha multiplicado la competencia este año, la mano de obra está cara, y todo hace que el panorama pueda antojarse triste". "Aunque no lamentable", añade. "Las cenas de empresa de estos días han funcionado, ya que el consumidor ha seleccionado bien la relación calidad-precio". Y es esta búsqueda de lo más idóneo lo que se mantendrá hoy.

Riesgo de droga barata

Lo que no baja -al revés, parece- son las ganas de perder la cabeza esa noche. El año pasado, se recordará, hubo una fiesta ilegal masiva en una cementera de Buñol. Es previsible que a un radio de unos 50 kilómetros de Valencia haya otra -mucho más modesta- este año, aunque en determinados foros se inquiere que podría celebrarse en La Marina Alta. Otra prevalencia será la del guateque casero regado con alcohol. Una constante que se espera en la mayoría de opciones es la de las drogas, más baratas y cortadas en crisis. La ONG Controla Club indica que el consumo de sustancias se triplica durante estas fiestas y que el peligro estriba en mezclar drogas que normalmente no se consumen, o también en dar el salto hacia los primeros consumos de cocaína (consolidada como la droga de Nochevieja, un lujo de saldo para decenas de miles en fin de año). Controla Club insiste en que no hay que pensar -ni mucho menos- sólo en jóvenes cuando se asocia fin de año con coca, y calcula que, a lo largo de toda la Navidad, el "incremento del consumo de alcohol y drogas afecta a más de un millón de valencianos".

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