La consagración de un modesto

Por primera vez en su historia, el Banfield, un club de los suburbios sureños de Buenos Aires, se consagró campeón de Argentina (Torneo Apertura) y confirmó la pobre coyuntura de los grandes: River Plate, Boca Juniors, Independiente, San Lorenzo y Racing. En un tiempo de poco brillo en el juego triunfan los que apuestan al sacrificio de sus juveniles, de los veteranos que vuelven de Europa o de los que nunca se han podido marchar a ganar más dinero. Así, uno de los últimos cinco torneos lo ganó el Boca, otro el River y el resto clubes chicos: el Lanús, el Vélez Sarsfield y ahora el Banfield.

Ninguno de los grandes participará el año próximo en la Copa Libertadores. Será la primera vez que suceda desde 1983, cuando el Estudiantes de La Plata y el Ferrocarril Oeste los dejaron fuera. En 2010 jugarán el Estudiantes (ganó la Copa en 2009 y mañana debutará en el Mundial de Clubes), el Vélez, el Colón, el Lanús, el Banfield y el equipo que ayer debió resignarse con el subcampeonato, el Newell's Old Boys.

El Newell's, dirigido por Roberto Sensini, no pudo consagrarse campeón porque perdió 0-2 ante el San Lorenzo, que entrena Diego Simeone (Bordagaray marcó dos golazos) y sumó dos puntos menos que el Banfield, que ganó 12 partidos, empató cinco y perdió dos. Para completar el cuadro de mediocridad del certamen, el Banfield se coronó con una derrota: 2-0 ante el Boca en la Bombonera. Apenas 3.500 hinchas suyos pudieron asistir al partido porque el Boca no les dio más entradas. Con un fútbol mezquino, pero efectivo, el plantel de Julio César Falcioni se ha valido del portero Lucchetti, los defensas López y Méndez, el medio Erviti y, sobre todo, el letal atacante uruguayo Silva, máximo goleador con 14 tantos.

Banfield es una ciudad de la periferia de Buenos Aires que nació con la instalación de una estación de ferrocarril en 1871. Lleva el nombre del gerente del Ferrocarril Sur, Edward Banfield, tan británico como el origen de los trenes en Argentina. Precisamente fueron los británicos quienes poblaron Banfield y aún se conservan allí casas a su estilo. En 1896, profesionales y comerciantes de esa nacionalidad fundaron el Banfield. Casualidad: el Newell's también tuvo un origen británico.

El Banfield se ganó su apodo de Taladro en 1940 porque perforaba a sus rivales, pero sus mejores resultados los había conseguido en 1951 y 2005, cuando fue subcampeón. Su periplo ha sido inestable: en los casi 80 años de profesionalismo del fútbol argentino jugó sólo 45 en Primera División. Han vestido su camiseta Carrascosa, La Volpe, Zanetti, Cruz y Dátolo. Con la consagración de ayer también se comenzará a hablar de otro atacante uruguayo, Fernández; del centrocampista colombiano Rodríguez, de 18 años, y de sus compañeros.