Nueva bronca en la Asamblea por los consejeros de la caja

La elección de los 53 consejeros generales de Caja Madrid que le corresponden a la Asamblea de Madrid, en el pleno del próximo 17 de diciembre, reabrió ayer una nueva bronca entre la oposición (PSM e IU) y el PP. La mecha la encendieron los socialistas, que plantearon en la reunión de la Junta de Portavoces que al PP le corresponde uno menos de los consejeros que se atribuye. "El PP pretende hacer una distribución como si no se hubiera producido una nueva composición de la Asamblea", explicó la portavoz socialista, Maru Menéndez. Se refería a que los tres diputados imputados en el caso Gürtel han dejado de pertenecer al grupo popular y figuran como no adscritos.

Según el PSM, eso reduce a 29 los consejeros que puede elegir el PP y eleva a 19 los de los socialistas. IU podrá designar a cinco. Los socialistas presentaron un escrito de reconsideración a la Mesa de la Asamblea. Si no prospera, amenazan con un recurso contencioso-administrativo.

También IU echó leña al fuego. "Nos preocupa que una ley aprobada con efecto retroactivo para considerar no adscritos a los diputados imputados no se tenga en cuenta a la hora de distribuir consejeros de Caja Madrid", dijo la portavoz, Inés Sabanés.

El PP fue conciliador, para no meter cizaña en la negociación sobre el Consejo de Administración de la entidad bancaria. "Es una pequeña confusión", afirmó el portavoz del PP, David Pérez. "El proceso se ha reanudado después de haber sido suspendido por decisión judicial y ya se estableció el reparto de consejeros según la proporción de ese momento".