El PSOE desoye el órdago de López y le insta a liderar un consenso sobre el Inem

Patxi López no ha conmovido al PSOE. Su órdago al "Gobierno de España si quiere impedir" la transferencia de las políticas activas de empleo apenas ha encontrado eco en el Grupo Socialista en el Congreso. De hecho, uno de sus máximos responsables redujo ayer toda la polémica política abierta en el País Vasco desde que EL PAÍS desvelara el pasado domingo un pacto entre Zapatero y el PNV a que, "sencillamente, se ha respetado un acuerdo con otro grupo político para que se consigan unas transferencias más completas y más consensuadas".

En Madrid, los socialistas no comparten la teoría de que Patxi López "ha perdido credibilidad porque se produzca este retraso" en poner en marcha el Servicio Vasco de Empleo. Y tampoco ven tocado al propio vicepresidente tercero del Gobierno, Manuel Chaves, "porque cuando manejaron fechas no se había llegado a ningún acuerdo en la negociación de los Presupuestos del Estado", alegan.

"El 'lehendakari' tiene una ocasión de buscar el acuerdo más amplio posible"

"No estamos dispuestos a hablar de la caja única de la Seguridad Social"

El PSOE no esconde "en ningún momento" que existe un acuerdo con el PNV sobre la transferencia de las políticas de empleo, pero lo enmarca en "la coincidencia de que debe ser una competencia consensuada, que necesita de más tiempo para que sea más compartida y no aparezca como excluyente". Y para justificar el incumplimiento asegurado de su entrada en vigor para el 1 de enero, un portavoz socialista en el Congreso apunta: "El PNV se ha pasado casi 30 años sin lograrla y ahora no va a pasar nada porque nos retrasemos unos meses en conseguir una buena transferencia. Parece que nos hemos olvidado del retraso en la época del PNV. Bienvenido sea ese tiempo que ganamos", remarca.

Preguntado, por la incómoda situación política a la que ahora se ve abocado el lehendakari, el PSOE da la vuelta al argumento e insta a Patxi López a que "lidere el consenso para trabajar con todos en la mejora de esta transferencia". Y es que en el Congreso "nadie" tiene la sensación de que se ha causado "un agravio" al Gobierno vasco al descubrirse este pacto entre Zapatero y el PNV con motivo de la negociación de los Presupuestos. "Hay un acuerdo político que incluye otra serie de puntos. Vemos que hay una oportunidad de mejorar una transferencia que va a llegar por primera vez en muchos años y no hay que volverse loco".

Incluso dentro del grupo de parlamentarios vascos hay quien ve "una oportunidad" si el lehendakari "se pone al frente de la búsqueda de este consenso, explica las cosas diciendo lo que se pretende con este acuerdo, y plantea la búsqueda del mayor consenso para que la transferencia se produzca sobre unas bases compartidas por todos".

Desde Madrid, "en ningún momento" se va a contribuir, advierten, a "alimentar una polémica que nos está dejando asombrados". El Grupo Socialista no ve que el acuerdo con el PNV suponga una desautorización para el Gobierno vasco e insiste en que no pasa nada porque se retrase la transferencia "unos meses" si su contenido es positivo.

Sin embargo, el PSOE pone especial énfasis en descartar que sea el PNV quien "vaya a marcar el ritmo" en el debate que vuelve a abrirse sobre las transferencias de empleo. "Ni por un momento estamos dispuestos a hablar de la caja única de la Seguridad Social", advierte. De esta manera se aborta la posibilidad, pretendida siempre por la dirección jeltzale, de añadir las políticas pasivas de empleo (las pensiones y cotizaciones sociales) dentro de una transferencia global. "Que se olviden", apuntan fuentes del socialistas, que reiteran que la caja única de la Seguridad Social es una línea roja que no se va a cruzar, por mucho que lo pretenda el PNV. "Y eso lo saben", agregan.

Con todo, queda excluido cualquier reproche del PSOE al PNV por incluir el retraso de la transferencia de empleo en el "acuerdo multilateral" sobre los Presupuestos del Gobierno central. "Forma parte de una negociación. En ese momento se decidió aceptar el compromiso de que era conveniente abordar una transferencia más completa, adecuar su financiación, y por eso se vio que era mejor abordarla con el tiempo suficiente".

Desde el Gobierno vasco el foco de las críticas se dirige hacia el PNV. Así lo hizo ayer su portavoz, Idoia Mendia, al asegurar que "el PNV tendrá que dar muchas explicaciones" por el contenido del acuerdo desvelado por este diario, "porque perjudica los intereses de Euskadi". Mendia defendió la actuación del Gobierno en este asunto y aseguró que, aunque la llegada de la transferencia a Euskadi se vaya a retrasar, "el ritmo de trabajo lo seguimos manteniendo como si se fuera a producir el 1 de enero".