La financiación mixta centra las reacciones al presupuesto
La apertura al sector privado de los proyectos inversores en infraestructura de la Junta es el aspecto de los presupuestos de 2010 que mayor atención ha concitado en IU y PP. Ambos partidos reaccionaron en direcciones opuestas -los izquierdistas abominaron de la rendición al capital y al PP le pareció bien-, pero coincidieron en la crítica feroz al Gobierno socialista por sus planteamientos. En consecuencia, cada uno formulará una enmienda a la totalidad, si bien aún resta el trámite final del visto bueno de sus direcciones.
La portavoz parlamentaria del PP, Esperanza Oña, acusó a los socialistas de plagiar una medida que lleva años proponiendo su partido y vienen ejercitando varios países europeos con éxito. De hecho, muchos ayuntamientos la practican ya para financiar proyectos a los que no llegan a cambio de ceder la explotación por un tiempo. No obstante, Oña dijo que era "una mala copia" y se mostró convencida de que el Gobierno de José Antonio Griñán lo "hará mal" porque "lo han venido criticando durante 30 años".
El coordinador de IU, Diego Valderas, cree que se trata de la "conversión de la Junta en un negocio privado porque crea una enorme dependencia de los poderes económicos, de las grandes empresas y de los bancos". Valderas, además, alegó: "Los presupuestos no tienen un corazón de izquierdas, si acaso, un marcapasos de derechas y un latir privatizador y conservador".
Por su parte, la consejera de Obras Públicas, Rosa Aguilar, señaló que su departamento ha consignado 4.500 millones para hacer frente a las anualidades de los proyectos previstos en el caso de que no se encuentre financiación privada, aunque ya hay una decena de entidades interesadas.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.