Tres cojinetes defectuosos paralizan los dos grupos de Ascó
Tres cojinetes defectuosos instalados en sendos generadores del complejo nuclear de Ascó (Ribera d'Ebre) han forzado la parada de las dos centrales propiedad de Endesa e Iberdrola. El fabricante de las piezas alertó el miércoles a la Asociación Nuclear Ascó-Vandellòs (ANAV), consorcio que gestiona las nucleares catalanas, de que había detectado una partida de piezas taradas que habían sido instaladas en ambas plantas.
La dirección decidió desconectar Ascó II de forma inmediata y contaba con un margen de 72 horas para sustituir la maquinaria afectada del otro grupo nuclear, según la normativa técnica. El plazo se agotó ayer sin que se hubiera reparado la incidencia, por lo que se desconectó el reactor. El paro no programado no ha supuesto ningún riesgo para la población ni el medio ambiente, subrayó el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN).
Endesa e Iberdrola dejan de facturar cerca de 1,2 millones de euros por cada jornada que pasa con ambas plantas paradas.
Los generadores diésel están directamente relacionados con la seguridad de una nuclear: son una fuente de energía de emergencia que arranca automáticamente en caso de que una avería deje sin alimentación otros componentes de la central.
Generadores diésel
Las plantas cuentan con dos generadores independientes para garantizar esta corriente eléctrica de emergencia. En el caso de Ascó II, ambos componentes contenían piezas defectuosas, lo que obligó a desconectar la central el mismo miércoles por motivos de seguridad. En Ascó I sólo uno de los generadores estaba afectado por la avería, pero la normativa impide que la planta siga funcionando sin otro generador de reserva durante más de tres días. Los técnicos de la planta trataron, sin éxito, de sustituir la pieza afectada sin parar el reactor, que fue desconectado ayer por la mañana.
El último paro forzoso de Ascó II ocurrió el pasado mes de mayo, para comprobar el posible desajuste de dos válvulas de seguridad, una irregularidad que ya se había detectado anteriormente en Ascó I.
Las plantas gestionadas por la ANAV (Ascó I, Ascó II y Vandellòs) acumulan más de la mitad de las incidencias generadas por el parque nuclear español en los últimos dos años.
