"Tusquets no se vende", afirma Beatriz de Moura

"La editorial no se vende y también descartamos entrada de capital; llevamos años muy sólidos y en 2010 tendremos libros de Irving, Connolly y Grandes". Con esta contundencia disipó ayer la fundadora de Tusquets, Beatriz de Moura, toda rumorología sobre el sino de la editorial que creó en 1969 y que ha aparecido tras la muerte de uno de sus socios y ex compañero, Antonio López Lamadrid, el 21 de septiembre.

"Lo que más ilusión le hacía a Toni [López Lamadrid] es que la gente le recordara y por eso pensamos en montar una fundación con su nombre de ayuda a los autores para la creación literaria con un jurado que escogería qué autor o proyecto podríamos financiar", avanzó ayer Beatriz de Moura.

La editora

ha cambiado radicalmente su condición en el sello que creó junto a su entonces pareja el arquitecto Òscar Tusquets, que financió la editorial con 1.615 dólares de 1969: "He estado 40 años casi sin participaciones; sólo tenía las que los ocho accionistas iniciales me iban regalando. Ahora, tras la muerte de López Lamadrid, De Moura posee el 95% de la editorial; el 5% restante está en manos del ahora director general, Pantaleón Bruguera, cuyo bisabuelo creó la mítica editorial que lleva su apellido y cuyo padre vivió la crisis que acabó con ella. Bruguera, accionista desde 1999, llevaba con López Lamadrid los números de Tusquets desde 1997.