Aralar reelige coordinador a Zabaleta con el menor respaldo de su historia

Patxi Zabaleta resultó ayer reelegido coordinador general de Aralar para otros tres años con el 64,1% de los votos de los cerca de 300 delegados presentes, con mucha diferencia el respaldo más pobre que le ha dado la militancia hasta el momento. Los demás delegados se abstuvieron, ya que no se podía votar en contra. Pese a ser el único candidato a ocupar el cargo, Zabaleta,creador del partido y su líder desde 2002, sufrió una notable pérdida de confianza entre sus correligionarios que participaron en el cuarto congreso, celebrado el pasado fin de semana en Pamplona. Algunos dirigentes atribuyeron el hecho a la existencia de sectores partidario de "renovar" la cúpula del partido.

El apoyo a la elección del líder del partido desciende casi 30 puntos

En las tres anteriores ocasiones -los congresos de 2002, 2004 y 2006- en que salió nombrado coordinador general, Zabaleta siempre había superado de forma holgada el 90% de los votos de los congresistas. Esta vez, su respaldo ha caído en casi 30 puntos con respecto a 2006, cuando sumó el 93% de las papeletas. Zabaleta no quiso dar mayor relevancia a este hecho y, en declaraciones a este diario, aseguró sentirse "satisfecho" y "plenamente ratificado" por las bases de Aralar. En cualquier caso, tampoco escondió su voluntad de ir preparando el relevo de cara al próximo congreso en 2012.

El cónclave también nombró vicecoordinador a Jon Abril, que repite funciones, y creó una nueva figura, la Secretaría de Organización, que recayó en Rebeka Ubera, portavoz en las Juntas Generales de Guipúzcoa. Al tratarse de una candidatura cerrada, ambos obtuvieron los mismos votos que Zabaleta. Para completar la ejecutiva con diez vocales se presentaron en listas abiertas hasta 34 militantes. La organización del partido no precisó sus porcentajes de votos.

Tras la proclamación de los miembros de la nueva dirección, Zabaleta cerró el congreso con un discurso en el que trazó las líneas de actuación de Aralar para los próximos tres años. Los presentes no le interrumpieron en ninguna ocasión durante sus casi 17 minutos de alocución. Hizo hincapié en que el objetivo del partido a corto plazo es lograr "el cambio político" en Euskadi y Navarra, para lo cual tratará de "unir fuerzas" con aquellas formaciones que lo deseen. Reiteró que las políticas de izquierda, la orientación abertzale y la defensa de la democracia serán las principales señas de identidad de su formación.

El congreso también aprobó la ponencia política y el nuevo reglamento interno, de los que ayer no se facilitaron datos.

A la cita asistieron representantes de otras formaciones, como Uxue Barkos (NaBai), Maiorga Ramírez (EA), Mikel Arana (EB) o Ángel Luis Fortún (CDN), entre otros. No acudió ningún dirigente del PNV, pese a que habían sido invitados "todos los partidos", apuntó Zabaleta. También estuvieron presentes el líder de ELA, Adolfo Muñoz, y Sabino Santolalla, de CC OO.