El novato del clan de los Trinitarios

Crimen casi resuelto. Los agentes de Homicidios y de la Brigada de Información detuvieron en la madrugada de ayer al supuesto autor del disparo que mató el pasado viernes a Isaac Nathael B. G., (y no Isaac Dantés V. G., tal como informaron fuentes policiales el día de la muerte) un jefe intermedio de la banda juvenil de los Dominican Don?t Play (DDP), de 17 años.

El arrestado es un menor de la misma edad de nacionalida dominicana que lleva poco tiempo en la banda rival de los DDP, los Trinitarios, según fuentes de la investigación. Los agentes no descartan más detenciones en los próximos días hasta completar la decena de jóvenes que atacaron al joven a la salida de una discoteca en Azca.

La policía no halla el arma utilizada en el homicidio en el piso del arrestado

Los agentes quieren detener a los diez jóvenes que atacaron a Isaac Nathael

La detención de este menor se produjo en su domicilio a las dos de la madrugada, según fuentes policiales. Éstas no quisieron facilitar el barrio o el distrito, ya que esperan detener en breve a algún componente de los Trinitarios que reside cerca del menor. El detenido lleva poco tiempo en esta banda juvenil y de él sólo consta una detención por un delito de poca importancia, supuestamente, un hurto.

Los policías registraron ayer el domicilio del detenido y no hallaron el arma homicida ni restos balísticos. Eso sí, localizaron algunos vestigios que implican al menor con el crimen, según fuentes de la investigación. Tampoco hallaron propaganda ni libros relacionados con la banda a la que presuntamente pertenece el menor arrestado. El menor pasó ayer por la tarde a disposición judicial.

Ésta es la tercera detención que se produce por la muerte de Isaac Nathael B. G. Las dos primeras fueron el pasado lunes cuando la policía arrestó a dos integrantes de los Trinitarios, ambos de 20 años. Anoche fueron trasladados al Registro Central de Detenidos y hoy pasarán a disposición judicial.

La madre del chico muerto de un tiro acudió ayer al Instituto Anatómico Forense para reclamar el cadáver e iniciar los trámites para repatriarlo a República Dominicana. A la Ciudad Universitaria acudió una veintena de familiares, entre los que estaban la novia del fallecido y el bebé que tuvieron ambos hace menos de tres meses, además de los hermanos y los amigos. Se bajaron todos de una furgoneta de grandes dimensiones.

La madre, Lilliam, andaba de forma lenta, acompañada por una representante del Consulado de la República Dominicana y la abuela del fallecido. La mujer llevaba unas gafas de sol con grandes cristales negros. El mismo color que la ropa que vestía. Bajó despacio las escaleras del Instituto Anatómico Forense, con gesto de gran sufrimiento.

La familia llegó poco antes de las dos de la tarde, cuando cierra el centro al público. Estuvo dentro cerca de una hora hasta que resolvió todo el papeleo. La subida de las escaleras le resultó aún más difícil. Había problemas para trasladar el cadáver de Isaac Nathael a su país natal: el precio era más alto de lo previsto debido a que había que embalsamar el cuerpo (unos 1.200 euros) y pagar el traslado al tanatorio de la M-30 para hacer este proceso de conservación.

La madre caminó de nuevo muy despacio. No quiso hablar a los periodistas. Tan sólo se limitó a gesticular con movimientos lentos de cabeza y a pocas palabras en medio de un río de lágrimas. "No, no me siento mejor con la detención del autor del disparo", se limitó a decir. "Lo estoy pasando muy mal", añadió.

Acto seguido rodeó la furgoneta blanca y se fundió en un abrazo con su hijo pequeño. Ambos estuvieron así varios minutos a pleno sol, pese a las altas temperaturas que se registraron ayer en Madrid. Después se subieron en el vehículo y se marcharon despacio.

La familia de Isaac Nathael nombró ayer un abogado para personarse como acusación particular en la causa. Ya han presentado toda la documentación en el juzgado que instruye el caso, en plaza de Castilla.