Recuperar el toro de Bilbao

Todo espectáculo está sujeto a interpretaciones de los espectadores. El toreo, cargado de sensaciones artísticas, permite un mayor número de matices en las opiniones de los aficionados. Con la reflexión que permite el paso de varios días desde que cayó el telón en Vista Alegre, tres especialistas taurinos y habituales del coso bilbaíno coinciden en los calificativos negativos -"decepcionante", "flojo" y "pobre"- como resumen de las pasadas Corridas Generales.

Leopoldo Sánchez Gil, presidente del Club Cocherito de Bilbao, tiene claras las causas de la decepción: "Ha fallado el toro, que es el emblema de Bilbao. El planteamiento del ciclo estaba a favor de las figuras y esto lleva a sacrificar el trapío del toro".

"Tras dos años geniales, nos ha llegado una feria para reflexionar"

"El ciclo estaba a favor de las figuras y eso lleva a sacrificar el trapío"

Covadonga Saiz, aficionada y habitual organizadora de coloquios durante la Aste Nagusia, hace hincapié en la presentación de las ganaderías como motivo de un ciclo especialmente pobre: "Si no hay toro, no hay lucimiento. Se ha bajado el nivel en la presentación salvo Victorino, la de Joselito y El Ventorrillo. Además, no han embestido sin que podamos aludir a una razón clara".

Carmelo Rodrigo, comentarista taurino en diversos medios de comunicación, ve las razones de "una de las peores ferias que se ha visto" en la tónica general de la temporada. "A priori, el cartel de Bilbao era ilusionante, pero los toros no han embestido aquí como no lo han hecho en ninguna feria importante. La falta de calidad y fijeza de las ganaderías es un mal general", abunda.

Pese a las pocas alegrías vividas, los tres coinciden en destacar a Diego Urdiales, Enrique Ponce e Iván Fandiño como diestros destacados. "Urdiales estuvo en torero importante, además de heroico con el último victorino. Se ha ganado la recompensa de dos tardes en Bilbao y no siempre en las corridas duras", señala rotunda Saiz, que también disfrutó con otros matadores: "La dignidad de Fandiño tiene que abrirle puertas, pero también me gustaron Ponce; Perera, con una faena intensa con la mano izquierda, y El Juli, quien destacó con el capote el primer día y luego tuvo un gesto en una situación crítica para la empresa".

El "pundonor" del riojano también cautivó a Carmelo Rodrigo, quien destaca también la labor de Ponce en el cuarto toro de El Ventorrillo y la presentación en Bilbao del hierro dirigido por Joselito, anunciado bajo El Tajo y La Reina.

La actuación del valenciano y la honradez de Urdiales y Fandiño también merecen el elogio de Sánchez Gil, "sobre todo cuando Ponce respondió al estímulo de un espectador y demostró que puede emocionar con un talento fuera de lo común".

En el plano negativo, a la opinión común sobre el decepcionante ganado exhibido se añaden los nombres de varios matadores. "El mal momento de El Cid, un torero que me gusta mucho, y la espantada de Morante son lo que más me ha decepcionado", afirma Rodrigo, quien ve "malísimo" el encierro de Torrestrella. Para el presidente cocherista, varios diestros no han cuajado.

"Esperaba mucho de Sebastián Castella y no estuvo a la altura, lo mismo que me decepcionó El Juli por su falta de frescura en los seis toros. Además, los jóvenes como Pinar y Luque debían haber afrontado su tarde con mayor pundonor y ambición", abunda Sánchez Gil.

A pesar de la decepción, los tres especialistas quieren quitar trascendencia al mal ciclo. "Es un bache en un buen camino", sentencia Saiz. "Es un frenazo, que coincide con la tónica general de otras plazas, y además teníamos el listón muy alto", indica Rodrigo, con quien coincide Sánchez Gil: "Después de dos años geniales, nos ha llegado una feria para reflexionar, porque se ha dejado demasiado en manos de las figuras".

Saiz tiene claro que la solución pasa por dar aire fresco en las ganaderías: "Daría paso a otros hierros, que permitan la variedad de encastes y volver a la presentación del toro de Bilbao de hace tres años. No se trata de decir ganaderías, sino de seguirlas y seleccionar bien, además de cuidar la presentación". En la misma línea, concluye Leopoldo Sánchez-Gil: "Hay que cuidar el trapío y se debe reflexionar sobre el equilibrio entre figuras y ganaderías, porque el toro es el emblema de nuestra feria y hay que darle protagonismo durante las Corridas Generales".