El 1,4% de los madrileños toma cocaína de forma habitual

Entre 2001 y 2005 el consumo habitual de cocaína en la región se puso por las nubes. Pasó de un 0,6% a un 1,6% de la población entre 15 y 64 años. Ahora, explicó ayer la viceconsejera de Ordenación Sanitaria e Infraestructuras, Belén Prado, parece que el consumo "se ha estabilizado". El último dato, procedente de la Encuesta Domiciliaria sobre Alcohol y Drogas de 2007, habla de un 1,4% de madrileños que esnifan de forma habitual (en los 30 días previos a la encuesta).

La tendencia es similar en el resto de España, aseguró ayer una portavoz del Plan Nacional sobre Drogas del Ministerio de Sanidad. El consumo habitual desciende, entre 2006 y 2008, de un 2,3% a un 2% entre los estudiantes de Secundaria. Los chavales también aseguraron en la encuesta que la disponibilidad (la percepción de que encontrar cocaína es fácil) era menor que dos años antes. Aun así, la cocaína sigue siendo la segunda droga más consumida en España y en el resto de Europa, por detrás del cannabis.

La última encuesta nacional sobre hábitos de consumo de la población general (2007- 2008) es menos halagüeña. El 1,6% de los ciudadanos entre 15 y 64 años se declaraba consumidor habitual, exactamente la misma proporción que dos años antes. Un 8% decía haber probado la cocaína alguna vez, frente al 7% de la encuesta anterior. Además, el estudio recogía un aumento en el consumo de cocaína en forma de base o crack.

Donde se notan los efectos perniciosos de la cocaína es en las urgencias de los hospitales. Los centros madrileños atendieron 13.296 emergencias relacionadas con el consumo de drogas, según datos de la Consejería de Sanidad. Casi la mitad (el 47,9%), provocadas por esnifar cocaína.