La letra pequeña

Tal y como reflejaron los diarios en su portada, miles de españolitos que no cobran ninguna prestación porque se les agotó, acudieron a las oficinas del Inem para poder cobrar el "nuevo subsidio". Yo fui uno de ellos. Los funcionarios, para no cargarse de trabajo, se aprestaron desde el principio a informar con carteles de que uno de los requisitos era agotar el paro a partir del 1 de agosto.

La medida se hizo efectiva el lunes 17 de agosto. "Y bastante con que es retroactiva a partir del 1 de agosto, ya que habitualmente no lo son", me dijo la funcionaria del Inem. Mi paro se agotó en mayo, con lo que no tenía ningún derecho a percibir nada.

Al ministro le parece que el error es no haber informado bien a los ciudadanos. Anuncian su medida social, para justificar la "S" de socialista en su logo, pero pasan por encima de la letra pequeña, la que suele marcar la verdadera intención de la medida. Es decir, hay más de un millón de parados que no percibimos nada, pero parece que, al Gobierno, con 340.000 votos le basta. Esperemos que amplíen la medida en las próximas semanas.- Francisco García. Madrid.

Salgo del Inem decepcionada y desengañada con el subsidio de 420 euros a los desempleados sin prestación. El problema de la medida es la letra pequeña, ya que sólo podrán cobrarlos aquellos parados que hayan agotado su prestación este mes de agosto. Es decir, la inmensa mayoría de parados de larga duración que dejaron de percibir el subsidio mucho antes del 1 de agosto y que llevan meses y años sin cobrar nada no percibirán ni un euro, cuando son los que más lo necesitan. Estos 420 euros anunciados a bombo y platillo parecen una artimaña publicitaria que recuerda a aquella otra de los 400 euros y que después la mayoría de la gente no cobró, o fue en una cantidad muy inferior, o tuvo que devolverlos. Este Gobierno es especialista en este tipo de maniobras propagandísticas.