Urkullu: "El PSOE quiere borrar el color diferente de Euskadi"
El líder del PNV defiende dialogar "hasta con el diablo"
El presidente del PNV, Iñigo Urkullu, se muestra convencido de que el PSE no se va a conformar con desalojar a su partido de Ajuria Enea y el siguiente paso va a ser intentar sacarle de diputaciones y ayuntamientos tras las elecciones municipales y forales de 2011. En una entrevista concedida a la agencia Europa Press, Urkullu asegura que el Gobierno socialista va a intentar "borrar de manera definitiva el color diferente" en el resto de las instituciones vascas para lograr una fotografía uniforme de España. Una estrategia que, a su entender, va a chocar con la realidad sociopolítica "que han vuelto a poner de manifiesto las elecciones europeas" de que en Euskadi hay mayoría nacionalista.
"La cuestión es cómo se lleva a la práctica" la retirada de carteles de ETA
Urkullu liga tales movimientos del PSOE a la aplicación de la ley de Partidos. En su opinión, queda demostrado que ha sido un instrumento inútil para lograr que la izquierda abertzale condene la violencia, pero, sin embargo, ha valido para alterar el juego de mayorías políticas. "Esto nos tiene que llevar a la lectura de que el objetivo teórico pudo ser uno, pero el objetivo oculto, que siempre ha denunciado el PNV, era que todo obedecía a una estrategia de Estado para poder alterar la composición de las instituciones y que hubiera un desalojo del PNV", manifiesta.
A renglón seguido, reprocha a los socialistas que "cuando se plantea la apelación a la lealtad institucional hacia la actuación del Gobierno vasco, entendiendo lealtad institucional como un juego de subordinación de las diputaciones, que tienen sus propias competencias, lo que se está planteando es: 'Mejor también que vayamos a por las diputaciones y los ayuntamientos de las capitales, como Bilbao".
En conclusión, la estrategia tiene recorrido "en la medida en que haya una aplicación calculada de la ley de Partidos en cada ámbito electoral y en la medida en que el mundo del MLNV, el brazo político que corresponda a ese mundo, no se distancie del terrorismo".
El presidente peneuvista ve "fuera de lugar" la declaración del ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, de que no va a haber un final dialogado de la violencia y de que no se legalizará a la izquierda abertzale sólo por condenar la violencia al tratarse de un movimiento táctico. "Ojalá hubiese un planteamiento sincero, taxativo de condena de la violencia y de apuesta sólo por las vías políticas para que pudiéramos hacer política sin excusas, que es lo que en estos momentos se impide en el ámbito de la normalización política de la Comunidad Autónoma Vasca y de Navarra", dice.
Para el líder peneuvista, ese tipo de declaraciones surge de la necesidad de reafirmar una imagen de "cambio en Euskadi" que sólo es eso, pues "la realidad sigue siendo" que "existe una organización terrorista que tiene como objetivo provocar el terror de la manera que sea".
Urkullu asegura que para atajar el terrorismo hay que usar todos los medios del Estado de derecho y deslegitimarlo socialmente, "pero además hay que dialogar hasta con el diablo". Agrega que el Gobierno central y ETA deberían hablar de cuestiones técnicas, mientras que "el diálogo político corresponde exclusivamente a las formaciones políticas". "Un diálogo y una negociación política entre los representantes de la voluntad popular es lo que demandamos desde el PNV, no a ETA, sino al Estado español", sostiene.
Sobre la polémica en torno a la retirada de carteles de ETA, afirma que, probablemente, el objetivo final del Gobierno vasco y del PNV es el mismo, es decir "eliminar la visualización" en las calles de Euskadi de los símbolos y mensajes que ensalcen al terrorismo. "La cuestión es cómo se lleva a la práctica, entendiendo que, en la sociedad en la que vivimos, hay que hacerlo con prudencia e inteligencia".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.