_
_
_
_
Cartas al director
Opinión de un lector sobre una información publicada por el diario o un hecho noticioso. Dirigidas al director del diario y seleccionadas y editadas por el equipo de opinión

¿Despenalizar el cohecho?

Según los medios de comunicación, la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, ha indicado la necesidad de despenalizar la dádiva a cargos públicos y autoridades para, así, despenalizar el cohecho y aliviar la situación del honorable presidente de la Generalitat valenciana. Estoy totalmente de acuerdo; me parece una gran idea, porque esa sabia medida contribuiría evidentemente a disminuir el número de delitos que se cometen en España, contribuyendo también a disminuir la sobrecarga de los juzgados.

Pero creo que no se debe quedar sólo en eso, sino despenalizar todos los delitos, tales como asesinatos, robos, hurtos, fraudes, etcétera, y dejar el Código Penal en blanco. De esa forma se acabaría con todos los delitos de un plumazo. Como es una gran idea, invito a Rita Barberá a que la madure un poco y a que la incluya su partido en su programa electoral para 2012; seguro que sus votantes sabrán apreciarlo.- Jesús Mallol. Madrid.

Con el caso Gürtel en plena efervescencia el Partido Popular ha sucumbido -un vez más- a la política del ventilador: Esparcir dudas y sombras sobre toda la clase política con tal de intentar tapar sus vergüenzas. El socorrido recurso del "y tú más" ha sido activado de nuevo. El daño que pueda causar a la credibilidad del sistema democrático parece tenerles sin cuidado. Los populares son maestros en la instrumentalización política de cualquier asunto público por delicado o peligroso que resulte. Justicia, terrorismo, autonomías, política hídrica y un largo etcétera son buenos ejemplos de ello.

En pocas semanas hemos pasado del "pagar los trajes en efectivo es lo más normal del mundo" a "todos los políticos reciben regalos". Dejando aparte la flagrante contradicción del argumentario -¿el señor Camps pagó en efectivo los trajes o se los regalaron?, porque ya no me aclaro-, resulta ridículo y peripatético lo de comparar trajes y anchoas. Yo creía que mi capacidad de asombro estaba ya colmada, pero por lo visto tendré que ampliarla. Y mientras, la democracia languideciendo.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_