_
_
_
_

El Gobierno desatasca el diálogo social aunque sin compromisos concretos

CEOE no insiste en sus pretensiones máximas y calma a los sindicatos

Manuel V. Gómez

El diálogo social pasó ayer la reválida a la que se enfrentaba. Gobierno, patronal y sindicatos desencallaron la situación en la que se había instalado la semana pasada y que amenazaba con hacerlo descarrilar. Así lo cuentan las tres partes en un comunicado conjunto que emitieron al final de una reunión de unas dos horas: "El Gobierno y los interlocutores sociales reafirman su voluntad de seguir avanzando en la negociación". El Ejecutivo logra así el objetivo que buscaba al abrir una ronda de contactos bilaterales a comienzos de semana.

La mayor parte de la reunión, según fuentes de la negociación, se empleó en pactar el comunicado, de 16 líneas y con un texto muy general que no recoge compromisos por ninguna de las partes implicadas. El contenido ni tan siquiera recoge plazos para el acuerdo. No obstante, desde ambos sindicatos se apunta que trabajarán para lograr un acuerdo antes del final de julio, incluso antes, en línea con las pretensiones del Gobierno. Esto, en principio, supone volver al calendario inicial. Pero dada la posición de partida, se antoja difícil que se pueda lograr.

El respaldo del Ejecutivo a las tesis sindicales engrasa la negociación
El próximo lunes está prevista una nueva reunión de los agentes sociales

Las mismas fuentes indican que en la reunión, el Ejecutivo, tal y como había dicho días atrás, dejó claro que no está en sus planes recortar en cinco puntos las cuotas de las empresas a la Seguridad Social, una de las demandas de la patronal que había enquistado la situación. Tampoco contemplaría, en esta ronda de negociación, emprender una reforma laboral que suponga entrar en el coste del despido.

Esto en principio supondría resituar la negociación en el ámbito del que se había salido la semana anterior al poner la patronal (CEOE) sobre la mesa su demanda de un nuevo contrato. O lo que es lo mismo, se vuelve sobre el documento que entregó el Gobierno a los agentes sociales en el que se contempla una rebaja de medio punto en las cuotas sociales, levantar el veto para que las empresas de trabajo temporal pueden operar en los sectores peligrosos (construción, química) y en la Administración pública y una prestación para parados sin renta, entre otras propuestas.

En cambio, desde la patronal se afirmó que ayer no se trató de posturas concretas, sino simplemente de constatar la voluntad de las partes de continuar con el diálogo social. La versión empresarial es que ayer se dejaron fuera de la mesa los asuntos más espinosos, lo que no implica que no vuelvan a aparecen en las próximas reuniones.

La primera versión concuerda con el compromiso que el Gobierno había asumido con los sindicatos en la reunión bipartita que mantuvieron por la mañana. Esta reunión formaba parte de la ronda de contactos bilaterales con sindicatos y empresarios con los que el Gobierno pretendía salvar el pacto que tanto necesita, dada su precaria situación en el Parlamento. El día anterior, y también el viernes, había tenido lugar el "contacto" entre el Ejecutivo y la patronal (CEOE), según fuentes del entorno de la organización.

La cita de la mañana sirvió para que el Ejecutivo tranquilizara a los sindicatos. Estos últimos habían mostrado malestar con los representantes del Gobierno en la mesa de negociación al no reprochar a CEOE que en la reunión de la semana anterior se presentara con las nuevas demandas y endureciera su postura. "Más esperanzado" se había mostrado Fernández Toxo después en la reunión en los micrófonos de RNE.

En lo que coinciden todas las partes, es en que los encuentros seguirán en los próximos días. Hay fuentes que apuntan al lunes como día de la próxima cita, mientras otras afirman que ya se ha pactado la fecha de las tres próximas reuniones.

Méndez (izquierda), Toxo y el ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, firman un acuerdo el pasado abril.
Méndez (izquierda), Toxo y el ministro de Trabajo, Celestino Corbacho, firman un acuerdo el pasado abril.EFE

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Manuel V. Gómez
Es corresponsal en Bruselas. Ha desarrollado casi toda su carrera en la sección de Economía de EL PAÍS, donde se ha encargado entre 2008 y 2021 de seguir el mercado laboral español, el sistema de pensiones y el diálogo social. Licenciado en Historia por la Universitat de València, en 2006 cursó el master de periodismo UAM/EL PAÍS.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_