Lasa ofrece su oficina a las "otras" víctimas del terrorismo

"Se abre un nuevo tiempo para el reconocimiento incluyente de todas las víctimas del terrorismo". Así de contundente se mostró ayer la directora de la Oficina de Atención a las Víctimas del Terrorismo del Gobierno vasco, Maixabel Lasa, durante su comparecencia en la Comisión de Derechos Humanos del Parlamento para dar cuenta de su línea de actuación en la legislatura recién estrenada. Y para remarcar ese carácter incluyente, recalcó que departamento atenderá, evidentemente, a las víctimas de ETA, pero "con igual respeto y consideración" a las víctimas del terrorismo de grupos como los GAL, Batallón Vasco Español o la Triple A. "Vamos a trabajar para que conozcan la tarea del Gobierno y vean reconocidas sus aspiraciones en su condición de víctimas".

Alerta sobre "el cansancio social" ante los actos de homenaje

Lasa entiende que su oficina está en condiciones de inaugurar esta nueva etapa porque las formaciones políticas han alcanzado un clima de mayor serenidad, rebajando la crispación partidista en lo que afecta a las víctimas del terrorismo. Hasta el punto de que ya no son utilizadas como arma arrojadiza en el debate político. La reparación y su consideración de víctimas no implicará en ningún caso algún tipo de reconocimiento en forma de homenajes en aquellas personas en las que puedan concurrir las circunstancias de víctimas y verdugos. "Se va a dar una respuesta que no equipare lo que no es equiparable, pero que responda a parámetros de justicia. Acrecentar la legitimidad del Estado a través de la revisión crítica de sus actuaciones contribuye a deslegitimar el terrorismo", explicó.

La directora, quien sigue en el cargo que ya ocupó las dos anteriores legislaturas con el lehendakari Juan José Ibarretxe, reconoció el trabajo desarrollado por el anterior Gobierno tripartito e incluso apuntó que en algunas cuestiones la política a seguir será una especie de punto y seguido. Pero también admitió algunos déficits en la anterior etapa. Lasa tuvo algunos roces con Joseba Azkarraga partito en relación a varias iniciativas sobre las víctimas y hasta con el propio lehendakari. Tal vez recordando esos desencuentros, insistió en la necesidad de un discurso "más claro, rotundo y contundente" sobre la deslegitimación del terrorismo, una mayor implicación de EITB en este asunto y la reforma del Plan de Educación para la Paz que se impartirá en los colegios. El Gobierno ha criticado que el elaborado por el anterior Ejecutivo resulta ambiguo.

Como proyecto más inmediato, anunció la puesta en marcha de una ventanilla única para resolver todos los trámites administrativos e invitó a reflexionar sobre los "síntomas de fatiga y cansancio social" que se vienen manifestando en torno a los homenajes de reconocimiento a las víctimas. "No van a desaparecer, pero hay que ver cómo se hacen", indicó.