Los vecinos de Carabanchel Alto denuncian que quedarán aislados

Los cortes de metro no gustan a nadie. Pero en Carabanchel Alto, donde denuncian que van a estar un mes "incomunicados" de la red de suburbano, el calendario para arreglar la línea 6 les convence aún menos. "La gente va a tener que levantarse más temprano para ir a trabajar", protesta Amparo Golderos, representante de la Asociación de Vecinos de Carabanchel Alto.

Esta zona de Madrid y el barrio de Abrantes (con más de 70.000 vecinos entre los dos) están conectados a la red de metro gracias a la línea 11, la verde oscura, que arranca en La Peseta y termina en el intercambiador de Plaza Elíptica, donde conecta con la línea Circular.

Esa conexión permanecerá sin servicio hasta el próximo 10 de julio porque forma parte tanto de la primera como de la segunda fase de cortes de la línea 6 (ver gráfico). En su lugar, los vecinos que quieran usar el metro deberán dejarlo en la parada de Plaza Elíptica de la línea 11 y conectar con autobús hasta Lucero por el oeste o hacia Arganzuela por el este. "Es una zona con grandes colapsos de tráfico. Vamos a perder mucho tiempo", añade Golderos.

En su lugar, la asociación de vecinos solicita que se modifiquen los tramos cortados, para que Plaza Elíptica permanezca conectada a la Circular "al menos por uno de sus extremos". La portavoz vecinal recuerda que en el sur de Madrid "viven muchos trabajadores, gente que madruga para ir a trabajar". Si el corte fuera en agosto, añade, molestaría menos a sus vecinos.