A golpes con el cristal blindado

Un nuevo alunizaje (empotrar un coche contra un comercio) se vivió a mediodía de ayer en la capital. Cuatro encapuchados asaltaron la sucursal que el Banco Santander tiene en el número 48 de la avenida de los Andes, a pocos metros de un conocido centro comercial en el Parque de las Naciones, en el distrito de Hortaleza.

Según explicó un testigo, los ladrones cruzaron un todoterreno en medio de la avenida y se metieron marcha atrás en la acera alrededor de la una y media de la tarde. Comenzaron a golpear las lunas, que resultaron destrozadas al tercer o cuarto intento, pese a ser blindadas. Luego se bajaron varios individuos pistola en mano. Los asaltantes empezaron a gritar que no se moviera nadie mientras les amenazaban con las armas. Uno de ellos se dedicó al cajero automático de la sucursal, hasta que lo vació de dinero. Mientras, sus compinches les esperaban en un BMW. Ni los clientes ni los trabajadores de la sucursal resultaron heridos en el atraco, que duró poco tiempo.

Los ladrones salieron a toda velocidad en los dos coches ante la mirada sorprendida de decenas de conductores que circulaban por los tres carriles de la avenida de los Andes. Minutos más tarde, dejaban el todoterreno abandonado en la M-40.

Por la tarde, cuatro operarios de una empresa de Getafe se afanaban en reponer los cristales machacados en el asalto.