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Los jueces frenan en Dénia el urbanismo expansivo

Una avalancha de sentencias protege zonas vírgenes

Los tribunales de justicia han vetado el urbanismo expansivo que la Consejería de Territorio pretendía aplicar en Dénia. Durante los dos últimos años, una avalancha de sentencias judiciales ha condenado las diferentes resoluciones con las que la Administración autonómica aumentó la edificabilidad en las zonas de más alto valor paisajístico de la ciudad, como el litoral de Les Marines o el entorno del parque natural del Montgó.

La judicialización del urbanismo en Dénia se debe al pulso que entre 2003 y 2008 mantuvieron, por un lado, el gobierno integrado por PSPV y BNV y, por otro, Territorio y las grandes promotoras. El gobierno local de izquierda redactó un plan urbanístico transitorio que pese a mantener el ritmo de los años dorados de la construcción -durante la etapa de socialistas y nacionalistas se llegaron a edificar más de 10.000 viviendas- intentaba al menos preservar los entornos más sensibles del municipio. Sin embargo, la consejería sometió ese plan a continuas correcciones para aumentar aún más la edificabilidad y desclasificar parte de los cuatro millones de metros cuadrados de la costa norte de Dénia que quería proteger el Consistorio.

Los tribunales vetan la expansión pretendida por Territorio La consejería corrigió al alza la edificabilidad del plan municipal
La consejería corrigió al alza la edificabilidad del plan municipal

El conflicto entre ambas Administraciones concluyó en verano de 2008, cuando una moción de censura del PP, con un tránsfuga ex socialista y tres partidos independientes, apartó del poder a PSPV y BNV. Sin embargo, los jueces aún debían pronunciarse sobre el intercambio de denuncias entre la Consejería de Territorio y el Ayuntamiento. Ahora lo han hecho y a través de unas 20 sentencias han rechazado el empeño de la consejería y de las grandes promotoras por aplicar los criterios del agresivo Plan General de Ordenación Urbana de 2000, aprobado por el PP y anulado por los tribunales tres años después.

Así, se han pronunciado a favor de proteger las escasas dunas vírgenes que quedan en el litoral de este municipio de La Marina Alta, de restringir la edificabilidad y las alturas en Les Marines y en el humedal del río Racons o de evitar un plan -también redactado en su día por el PP- para construir más de 20.000 viviendas en el litoral. En cambio, han avalado un emblemático proyecto de PSPV y BNV para construir un centro comercial y un teatro en la zona oeste de la ciudad, que curiosamente había sido anulado por el Consell muy pocos días antes del voto de censura que cambió el gobierno local en Dénia.

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Dos han sido los principales argumentos esgrimidos por los jueces: por un lado, el derecho del Ayuntamiento a diseñar su propio planeamiento frente a la injerencia de la consejería. Y por otro, la necesidad de aplicar criterios de sostenibilidad en el urbanismo. En este sentido, es sintomático el último fallo judicial, que anuló la decisión de Territorio de permitir la construcción de una urbanización de chalés adosados en el perímetro del parque natural del Montgó. El juez advirtió de que esa zona debía protegerse para poder conectar el parque con las zonas agrícolas del entorno.

Ante esta avalancha de sentencias, el PP y sus socios guardan por el momento un escrupuloso silencio. El gobierno que dirige la popular Ana Kringe debe redactar en pocos meses un nuevo plan general de la ciudad que sustituya al plan transitorio elaborado por el PSPV y el BNV y que, por cierto, también fue anulado por el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) debido a un fallo burocrático de la propia Consejería de Territorio.

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