_
_
_
_
'Minicrisis' en el Gabinete regional

Es la tercera remodelación del Ejecutivo en dos años

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

El Gobierno regional modificó anoche sus planes iniciales sobre la reubicación de las competencias. En un primer momento adjudicó Cultura y Deportes al vicepresidente. Mientras que Turismo se asignaba al consejero de Hacienda, Antonio Beteta. Pero a última hora de la noche decidió concentrar todas las áreas en manos de Ignacio González.

La eliminación de la consejería supone la tercera remodelación de gobierno desde el principio de la legislatura, hace dos años. En junio de 2008, tras el congreso del PP en Valencia, Aguirre retocó su Ejecutivo para dejar fuera a Manuel Lamela, encargado de Sanidad, y a Alfredo Prada, de Justica, por su cercanía a Mariano Rajoy.

Entonces se eliminaron tres consejerías (Hacienda, Vivienda y Justicia) y se integraron en otras ya existentes. Nueve meses después, en febrero de este año, estallaba el caso Gürtel. Alberto López Viejo, que ocupaba la Consejería de Deportes, aparecía implicado en la supuesta trama corrupta y fue obligado a abandonar su cargo. Santiago Fisas recogía la cartera de Deportes que él mismo había dirigido durante la legislatura pasada.

La decisión anunciada ayer por Aguirre no fue bien recibida por todos los diputados populares. Fisas es uno de los políticos más respetados en la Asamblea y su salida ha sido interpretada como un intento de aligerar lastre.

La portavoz de IU en la Asamblea, Inés Sabanés, calificó como "un sarcasmo" que el mismo día que reclama la reapertura de la comisión de investigación de los espías, el número dos de Aguirre asuma más competencias. "Es el punto final de un disparate continuo que remodelaron por una crisis y volvieron a retocar por otra", aseguró Sabanés. A la portavoz socialista, Maru Menéndez, tampoco le gustó la desaparición de la consejería. "Es como una broma", sentenció. "Cada vez que Rajoy elige a alguno de sus consejeros desaparece la Consejería", apuntó.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_