Un edil del PP de Valencia ha obtenido contratos a dedo en Málaga
El Ayuntamiento de Málaga ha adjudicado de forma directa sin ningún tipo de concurso desde el año 2001 varios contratos para la celebración de espectáculos piromusicales a una empresa familiar del concejal del PP en Valencia Juan Vicente Jurado, por un montante total que supera los 390.500 euros.
La empresa pirotécnica de este edil, Garuda S.A., ha ganado también los concursos públicos abiertos por el Ayuntamiento malagueño para los fuegos artificiales de la clausura de la feria de los cinco últimos años (incluido ya 2009), cuyos contratos suman otros 411.000 euros. También montó el espectáculo de apertura de 2008 por 160.00 euros.
La Ley de Contratos de las Administraciones Públicas permite la excepcionalidad del procedimiento negociado sin publicidad para aquellos casos en los que sólo exista un único profesional que pueda cumplir el objeto de la concesión, vía pensada para las contrataciones artísticas.
Los técnicos del área de Cultura justificaron por ejemplo los contratos para las veladas de San Juan de 2005, 2006 y 2007 "atendiendo a los criterios de calidad, originalidad y diseño de los espectáculos y demanda del público malagueño". Curiosamente, el propio Jurado tuvo que certificar en calidad de director artístico de los espectáculos que éstos habían sido creados por su compañía. Jurado, que es concejal desde 2003, dirige el área de Alumbrado y Fuentes Ornamentales.
Inmoralidad política
El PSOE ha pedido que el alcalde, Francisco de la Torre, comparezca hoy en el pleno para que de explicaciones sobre estos contratos "cargados de anomalías". Para el portavoz socialista, Rafael Fuentes, "la contratación de forma directa de estos servicios es una inmoralidad política y una acción escandalosa que habrá que aclarar si responde a un posible trato de favor".
El delegado de Cultura de Málaga, Miguel Briones, sostiene que todas las contrataciones "son legales" y que no hay "ningún tipo de actuación que pueda ser reprobable". Explica que Garuda tiene contratos con muchos ayuntamientos de distinto color político y que "no hay ningún tipo de vínculo, ni trato de favor, ni beneficio alguno" para su colega de Valencia. "La adjudicación es a una empresa, no a un concejal", insiste.
